Pedro Sánchez renuncia a dar la batalla contra los barones críticos para pacificar el PSOE
Ha aprendido la lección de las derrotas sufridas en Andalucía, Comunidad Valenciana... Está proponiendo ejecutivas de unidad en los congresos locales
Pedro Sánchez quiere pacificar, definitivamente, al PSOE. Se ha marcado este objetivo a un año vista de las elecciones autonómicas y municipales y en plena celebración de los congresos locales del partido, donde no está presentando candidatos propios en las regiones cuyos barones fueron muy críticos con él en su primer mandato en Ferraz.
Según explican a El Confidencial Digital dirigentes del PSOE, el secretario general “ha aprendido la lección” después de sus sonadas derrotas en los congresos regionales en los que, para intentar lograr cota de poder en federaciones a priori hostiles, logró unos resultados que provocaron justamente lo contrario.
Su primer batacazo se produjo en la Comunidad Valenciana donde, a los pocos meses de imponerse él en las primarias a Susana Díaz, impulsó a Rafa García como candidato alternativo a Ximo Puig. El presidente regional, no obstante, se impuso con contundencia, al igual que hizo después, en Extremadura, un Fernández Vara que tuvo que enfrentarse a otro aspirante con el cartel de sanchista.
El secretario general, pese a ello, realizó una nueva intentona en los congresos provinciales del PSOE de Andalucía, donde su fracaso fue aún mayor. Los afines a Susana Díaz, que se implicó de lleno en esos procesos, lograron las secretarías generales sin necesidad de primarias en cinco de las ocho provincias, y en las tres restantes vencieron a los candidatos de Sánchez.
Ejecutivas de unidad
Después de esas malas experiencias, y teniendo también en cuenta la necesidad de tener al partido unido a un año de nuevas elecciones, Pedro Sánchez ha renunciado a dar la batalla en los congresos locales que el PSOE está celebrando ahora. El secretario general sí impulsa a afines en las federaciones próximas, pero en aquellas cuyos barones fueron críticos prefiere llegar a acuerdos.
En concreto, señalan las fuentes consultadas por ECD, en las regiones ya citadas, y también en Aragón, los representantes de Sánchez, y el propio líder del partido, están renunciando a presentar candidatura propia, apostando en cambio por integrarse en “ejecutivas de unidad” dirigidas por afines a los secretarios regionales.
Así las cosas, “los procesos están siendo más rápidos y tranquilos de lo previsto”. Una circunstancia que “también ayuda de cara a preparar las próximas elecciones”.
Interlocución directa con los críticos
Esta nueva estrategia pactista de Sánchez también se está manifestando en una mayor y mejor comunicación con aquellos barones regionales que, en su primera etapa en Ferraz, fueron muy críticos con él.
Tal y como confirman a este confidencial, el secretario general telefonea con asiduidad no solo a los barones afines, sino también a Susana Díaz, Ximo Puig y Javier Lambán, sus principales rivales hace apenas un año.
Esas comunicaciones se producen “por lo menos una vez al mes”, y están ayudando a pacificar, “de una vez”, el PSOE.
