Problema para la Armada en Somalia. Seis registros de barcos y ninguna detención: los piratas actúan como los traficantes de droga y tiran antes las armas al mar
El esfuerzo internacional contra la piratería en Somalia, y más en concreto el de los militares españoles desplazados allí, no está siendo todo lo efectivo que debería. El motivo es que no pueden practicar detenciones en los registros de los esquifes si no encuentran armas a bordo, y los piratas, que lo saben, actúan como los traficantes de droga: antes, arrojan las armas por la borda.
Según datos a los que ha tenido acceso El Confidencial Digital, en los registros practicados por los buques de la Armada española en esa zona no se han realizado detenciones. Las fuentes consultadas explican que esa anómala situación tiene que ver con la ausencia de pruebas y con que la normativa vigente no pone remedio.
Según las mismas fuentes, los seis registros por parte de los marineros españoles desde el inicio de la operación, a diferentes embarcaciones sospechosas, han dado hasta ahora resultado negativo.
Cuando los piratas detectan a los equipos de registro de Infantería de Marina tiran las armas al agua, y sin pruebas, las detenciones no se pueden efectuar, a pesar de los indicios obtenidos con anterioridad, mientras eran observados. Es el mismo sistema que emplean los traficantes de droga, que se deshacen de los alijos antes de ser abordados.
Actualmente, en la zona de las Islas Seychelles y el Golfo de Adén se encuentran las fragatas ‘Numancia’ y la F-103 ‘Blas de Lezo’, además del petrolero ‘Marqués de la Ensenada’ con sus respectivos efectivos de Infantería de Marina para los registros.
