La ubicación en España de una Oficina del Programa Mundial de Alimentos centrada en África está en el aire: el Gobierno ha dejado su autorización al nuevo Ejecutivo
El periodo de transición política en que se encuentra España ha frenado la aprobación por el Consejo de Ministros de la autorización para que se instale en Madrid una Oficina del Programa Mundial de Alimentos (PMA), dependiente de la FAO, y que sería similar a las que ya tienen algunas agencias de Naciones Unidas como ONU-Mujeres.
El Gobierno en funciones iba a dar la autorización hace un par de semanas, pero finalmente lo retiró del orden del día del Consejo de Ministros porque suponía comprometer gastos para los próximos años –se dice que del orden de 100 millones de euros- y optó por dejar la decisión al próximo Ejecutivo.
La autorización se había ido retrasando en parte por la falta de entendimiento entre la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez, y el director de la Agencia Española de Cooperación Internacional, Francisco Moza, y también porque había algunos problemas jurídicos, que, al parecer ya estaban resueltos.
Atender necesidades urgentes de África
De esta forma, se podría instalar la Oficina en la capital de España, y también un Depósito Estratégico para la Distribución de Alimentos en Las Palmas de Gran Canaria, destinados fundamentalmente a cubrir necesidades urgentes en África.
El acuerdo para que España sea sede de esas instalaciones, y también de un Centro de Innovación Tecnológica para Emergencias, fue adoptado durante la visita que el 16 de septiembre hizo al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la directora ejecutiva del PMA, Josette Sheeran.
La ubicación en Madrid de la Oficina del PMA podría dar trabajo a varios centenares de personas y, además, facilitar que vehículos de transporte y muchos de los alimentos que son distribuidos por el mundo fueran adquiridos a empresas españolas.
Aunque aún puede haber tiempo suficiente, existe el temor de que, si no se produce pronto la autorización, el PMA busque otra sede; o que, dado que la actual directora ejecutiva está a punto de dejar el cargo, su sucesor o sucesora pueda tener otras preferencias.
España ha colaborado muy estrechamente en los últimos años con el Programa Mundial de Alimentos, y a lo largo del presente ejercicio su aportación fue de 50 millones de euros en ayuda para distintas crisis humanitarias, como las vividas en el Cuerno de África y en Libia.
