La última gran decepción de Rubalcaba: El País y Cebrián se han ‘pasado’ al Partido Popular ahora que las encuestas apuntan el triunfo de Mariano Rajoy
Alfredo Pérez Rubalcaba se siente “muy decepcionado”, y así lo ha comentado a su equipo de confianza, por el cambio que ha visto en su aliado político histórico, el Grupo Prisa. Y más aún por el giro que ha dado su consejero delegado, y antiguo amigo, Juan Luis Cebrián.
Fuentes cercanas al candidato socialista, a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital, relatan que Rubalcaba se siente muy indignado por el comportamiento del grupo periodístico: ha detectado un acercamiento progresivo de Cebrián a Mariano Rajoy y su núcleo duro.
Cebrián, ‘democristiano’
El enfado lo personifica sobre todo en el consejero delegado de Prisa, amigo del alma durante décadas, y que le había prometido un firme apoyo durante la campaña electoral para las generales.
Según cuenta Rubalcaba, Juan Luis Cebrián se define ahora en privado, ante sus interlocutores del Partido Popular y de la derecha, como “democristiano”. Le ha llegado que, de hecho, algún alto dirigente del PP ha trasladado a algún destacado socialista que ante ellos se califica como “democristiano de toda la vida”.
Motivos para el apoyo
Las fuentes cercanas a Rubalcaba insisten en que el candidato esperaba que el tándem Prisa-Cebrián se volcaría a su favor durante esta campaña, y además con toda claridad. ¿En qué basaba su creencia?
En primer lugar, lo esperaba como pago a los muchos ‘servicios prestados’ en el pasado, y a la firme alianza que ambos han mantenido durante tantos años.
En segundo lugar, porque Rubalcaba creía que, con ese apoyo, quedaría más en evidencia la animadversión personal que Juan Luis Cebrián siente hacia Rodríguez Zapatero.
Dos motivos
Según Rubalcaba, Cebrián está convencido de la victoria de Mariano Rajoy en las elecciones del 20 de noviembre y, como la situación financiera de Prisa es agónica, ha decidido tratar bien al líder del PP, mientras que al candidato socialista lo hace a medias.
El apoyo de El País y de Cebrián es mucho menor de lo que Rubalcaba esperaba, y eso es lo que le tiene indignado, lo mismo que a su equipo de Ferraz. Dos puntos fundamentan especialmente su enfado:
-- No entiende que, según sus datos, la empresa que prepara las encuestas para El País, Metroscopia, trabaje también para el Partido Popular.
-- Tiene pruebas de ese acercamiento progresivo de Juan Luis Cebrián a la cúpula del PP.
