Vuelve a hablarse del “cansancio” del vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes

Se habló de ello en los estrenos del nuevo Gobierno, cuando los ministros, uno tras otro, se dedicaron a hacer todo tipo de promesas, propuestas de reformas y anuncios de gasto. Aquel primer desconcierto pareció arreglarse entonces, pero ahora el comentario vuelve a algunos ámbitos económicos: Pedro Solbes está “cansándose”.

Se habló de ello en los estrenos del nuevo Gobierno, cuando los ministros, uno tras otro, se dedicaron a hacer todo tipo de promesas, propuestas de reformas y anuncios de gasto. Aquel primer desconcierto pareció arreglarse entonces, pero ahora el comentario vuelve a algunos ámbitos económicos: Pedro Solbes está “cansándose”.

Lo que en primer lugar se escucha en esos sectores es que al vicepresidente y ministro de Economía le está costando mucho la relación con Miguel Sebastián, principal asesor económico de Zapatero en La Moncloa, que está asumiendo bastante protagonismo en esa área.

Pero también tiene que ver con otras decisiones del Gabinete. Solbes tiene un reconocido prestigio, de años, como gestor y teórico, y empieza a no estar dispuesto a dilapidarlo por iniciativas que lo mismo apuntan que van a subir los impuestos por los fondos de pensiones, como el propio Zapatero que promete resolver en persona el problema de los astilleros Izar.

Se comenta que encaja con dificultad tantas superficialidades y que añora su etapa, tan distinta, como ministro de Economía con Felipe González.

Si esto sigue así, Solbes podría irse cuando lleve dos años en el cargo, que es más o menos un plazo que él mismo se marcó al aceptar la propuesta de Rodríguez Zapatero. Por otro lado, los problemas de columna que sufre desde hace bastante tiempo no se arreglan.

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