Los barones del PP imponen cambios en el grupo parlamentario que preparaba Casado

Después del batacazo en las elecciones generales, el PP, y el propio Pablo Casado, se han visto obligados a reinventarse a sí mismos para tratar de salvar los muebles en las autonómicas, municipales y europeas del próximo 26 de mayo. La vuelta al centro político es el principal cambio de planes impuesto por los barones regionales del partido, pero no el único.

Según explican al Confidencial Digital altos cargos del PP, presentes en el Comité Ejecutivo Nacional de la semana pasada, y que además están informados de los cambios impulsados desde esa reunión, Casado también se ha visto forzado a modificar la composición del futuro grupo parlamentario en el Congreso.

El presidente popular, afirman las fuentes consultadas, estaba decidido a situar, en la dirección del PP en la Cámara Baja, a su círculo de confianza. Se hablaba, tal y como se desveló ayer en estas páginas, de Cayetana Álvarez de Toledo como portavoz, pero también de otros nombres que han sido vetados por los líderes autonómicos del partido.

“Se la tenían jurada a Teodoro”

Así, si la candidata del PP por Barcelona ha sido vetada como portavoz parlamentaria, lo mismo le ha pasado a Teodoro García Egea, que también figuraba en las quinielas para ese puesto o para estar al frente de la dirección del Grupo Popular en el Congreso.

Las fuentes consultadas por ECD explican que Casado, al igual que Pedro Sánchez con Adriana Lastra, buscaba poner a su número dos del partido al frente del Grupo Parlamentario. De esa forma, sería su máximo representante en las negociaciones con el resto de formaciones en la Cámara Baja.

A García Egea le precedía el éxito de las negociaciones con Ciudadanos y Vox en Andalucía para lograr un acuerdo de investidura que convirtiera a Juanma Moreno como presidente de la Junta de Andalucía. No obstante, algunos barones regionales no ven con buenos ojos al actual secretario general del partido.

Los dirigentes del PP contactados por este diario afirman que el “fuerte carácter” del número dos del partido “molestaba” en importantes ejecutivas regionales del PP, donde no gustaban las formas y el tono de García Egea. Tanto es así, añaden, que “se la tenían jurada” y “han esperado la oportunidad para devolvérsela”.

Se apuesta por Tejerina y Gamarra

Ahora, con un Pablo Casado “acorralado”, algunos barones regionales han frenado el movimiento del presidente del PP para dar plenos poderes a su número dos en el Congreso. Además, advierten, “también se van a frenar otras incorporaciones previstas”, que se sustituirán por “personas con más experiencia” en el partido.

Así, se apunta a Isabel García Tejerina y Cuca Gamarra, recientemente nombradas coordinadoras de la campaña del PP para el 26-M, como dos de las posibles candidatas a ostentar cargos de relevancia dentro del grupo parlamentario: “Las dos tienen experiencia y saben negociar con otros partidos”, señalan.

Además, ambas pertenecen a la ejecutiva nacional de Pablo Casado, aunque sus nombramientos formaron parte de la estrategia de integración del nuevo presidente popular: la ex ministra pertenecía a la candidatura de María Dolores de Cospedal, mientras que la alcaldesa de Logroño apoyó a Soraya Sáenz de Santamaría.

Otro de los nombres que más se está repitiendo en los últimos días es el de Ana Pastor como portavoz. No obstante, esa candidatura ha empezado a desinflarse con el paso de las horas.

En todo caso, señalan desde el PP, la idea de la ejecutiva nacional es convocar al nuevo Grupo Parlamentario en la misma semana de la reapertura de las Cortes del 21 de mayo, para anunciar los componentes de la nueva dirección de la bancada popular. Hasta entonces, afirman en Génova, “ninguna decisión es definitiva”.