Casado se ha hartado de que Álvarez de Toledo vaya por libre: “La entrevista en El País es inaceptable”
Ha indignado al líder del PP que su portavoz saliera en prensa pidiendo respeto a la autonomía del grupo parlamentario. Le acusa de “insubordinación” y “deslealtad constante”
Pablo Casado da un golpe de autoridad en el PP. Tras varios meses de sonadas polémicas protagonizadas por Cayetana Álvarez de Toledo, el líder de los populares no ha dejado pasar ni un día para destituirle, tras la entrevista que la ex portavoz parlamentaria concedió el pasado domingo a El País, en la que señaló directamente a la cúpula del partido.
Así las cosas, Casado ha emprendido una revolución en la dirección del PP con guiños al marianismo. La hasta ahora portavoz en el Congreso será sustituida por Cuca Gamarra después de semanas de presiones internas en Génova en las que se había puesto sobre la mesa la necesidad de una renovación.
Hay que recordar también que las polémicas protagonizadas por Álvarez de Toledo habían soliviantado a una parte del partido. Era evidente la distancia que marcaba con ella por ejemplo el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.
“La entrevista en El País es inaceptable”
Por encima de las presiones internas, según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes próximas a Pablo Casado, la entrevista que la ex portavoz del PP en el Congreso concedió el pasado domingo a El País ha sido el “verdadero motivo” que ha colmado la paciencia del líder del partido.
Pablo Casado califica en privado directamente las declaraciones de Álvarez de Toledo en esa entrevista de “inaceptables”. En el entorno del presidente del PP hablan sin cortapisas de “insubordinación” y “deslealtad constante” por parte de ella.
Cayetana Álvarez de Toledo acusaba en El País a la cúpula del partido, es decir al propio Casado y al secretario general Teodoro García Egea, de “invadir” las competencias del grupo popular que ella dirigía, al destituir al jefe de la asesoría parlamentaria, Gabriel Elorriaga –nombrado por ella-.
“El señor Casado me ha dicho que la entrevista con El País ha sido un ataque a su autoridad. Mi concepción de la libertad es incompatible con la suya de autoridad", explicaba sobre este asunto Álvarez Toledo tras conocerse su destitución.
Cansado del Gobierno de concentración…
Otro de los aspectos que ha “hartado” a Casado, según su entorno más cercano, es que “Álvarez de Toledo fuese constantemente por libre”, lo que en ocasiones echaba por tierra la hoja de ruta del partido.
“Tocaba hablar de las propuestas jurídicas del PP alternativas al estado de alarma y Cayetana salía a pedir un Gobierno de concentración. Esa situación era completamente insostenible en el tiempo. Pablo solo estaba buscando la excusa y la entrevista de El País se la ha puesto en bandeja”, reconoce a ECD un miembro del equipo de Casado
“El mayor reproche de Pablo Casado es mi insistencia en un Gobierno de concentración constitucionalista. La deriva de Sánchez no puede impedir que desde el PP exijamos una ruptura del PSOE con Podemos. Queremos un gobierno centrado. Es un emplazamiento a los socialistas sobre la necesidad de abandonar el camino de la ruptura que es Podemos”, defendió Cayetana Álvarez de Toledo este lunes en una comparecencia ante los medios a las puertas del Congreso.
… y no le perdona los insultos a Iglesias
Según las fuentes del entorno de Casado, consultadas por ECD, una de las últimas polémicas que comenzó a cansar de verdad al presidente del PP fue cuando la ya ex portavoz en el Congreso llamó “terrorista” al padre de Pablo Iglesias, lo que provocó un duro enfrentamiento con el vicepresidente segundo del Gobierno desde la tribuna.
Aseguran que molestó enormemente entonces a Casado que ese calificativo provocara el aplauso de los diputados de Vox a su portavoz parlamentaria en plena batalla electoral entre ambos partidos. Un escenario en el que el líder del PP no quedaba en buen lugar. “Desde ese día, Cayetana estaba sentenciada”, aseguran fuentes de la dirección nacional del partido.
Un nombramiento que ya llegó con polémica
Pablo Casado recuperó a Cayetana Álvarez de Toledo para las elecciones generales de abril de 2019, cuando la periodista y escritora encabezó la candidatura del PP por Barcelona y se enfrentó en las urnas al independentismo catalán.
Después fue nombrada portavoz en el Congreso en un proceso en el que Casado ya recibió presiones de una parte del partido que recelaba de su liderazgo.
