La dirección del PP se lava las manos con la guerra del agua en Doñana: “No tiene nada que ver con nosotros”

1. Apoyo a la medida del Gobierno andaluz
2. Del respaldo a eludir responsabilidades
3. Alerta de los ecologistas y la Comisión Europea
4. Baza electoral a un mes de los comicios

La polémica por la protección de Doñana se está haciendo larga para el Partido Popular. El debate sobre la sequía del parque natural acumula ya dos semanas después de que la Junta de Andalucía, liderada por Juan Manuel Moreno Bonilla, aprobara un proyecto de ley para legalizar los regadíos ilegales situados en el entorno de la reserva. Después de días de ataques cruzados entre el Gobierno y los populares a un mes de las elecciones municipales y autonómicas, el Ejecutivo andaluz solicitó reunirse con la Comisión Europea, que alertó de las graves consecuencias del plan de Moreno Bonilla, para intentar acercar posturas.

Sin embargo, este lunes, Bruselas volvió a criticar el plan del gobierno andaluz tras su encuentro con el comisario europeo de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevičius. La dirección del PP, que respaldó la iniciativa legislativa de la Junta, ahora se pone de perfil, rechaza aclarar si cambiará su postura sobre Doñana y deposita la responsabilidad en el equipo de Moreno Bonilla: "No tiene nada que ver con nosotros".

Apoyo a la medida del Gobierno andaluz

Desde que estalló la polémica al conocerse los planes de la Junta de Andalucía, Génova cerró filas con el presidente andaluz. El líder de la formación, Alberto Núñez Feijóo, defendió que la medida trataba de dar solución a “centenares de familias” que dependían de poder sacar agua del entorno de Doñana para regar sus cultivos. 

“Desde 2014 se deja fuera de ordenación una zona que está a 30 kilómetros del parque de Doñana. Hay una situación de hecho y ante esta situación, la Junta de Andalucía quiere buscar soluciones. Por supuesto preservando la joya de Doñana, por supuesto garantizando los acuíferos del parque y por supuesto intentando buscar soluciones”, afirmó el máximo responsable de los populares, que atacó a los socialistas por no haber puesto remedio al problema a la sequía de Doñana en todos los años que administraron la región andaluza. 

Del respaldo a eludir responsabilidades

Tras el férreo apoyo de Génova, que entró al choque con el Gobierno central, para defender la iniciativa del Ejecutivo andaluz, el equipo de Feijóo ha dado marcha atrás y señalan que es la Junta la que debe decidir si se replantea o no su propia norma tras el nuevo varapalo de Bruselas. "Es una pregunta para ellos. Nosotros no tenemos nada que ver", afirman fuentes de la dirección nacional de los populares. 

Alerta de los ecologistas y la Comisión Europea

El tirón de orejas europeo de este lunes no ha sido el primero. El Ejecutivo comunitario ya amenazó con sanciones a España si no daban marcha atrás en su plan para legalizar más regadíos en los alrededores del Parque natural. La Comisión, precisamente, envió una carta al Gobierno de Pedro Sánchez para alertar de que Bruselas tomaría “todas las medidas necesarias, incluyendo la interposición de un nuevo recurso ante el Tribunal de Justicia en el que solicitaría que se impusieran sanciones pecuniarias”.

Baza electoral a un mes de los comicios

Toda la polémica se enmarca en mitad de la precampaña electoral para los comicios autonómicos y municipales de finales de mayo. Aunque Andalucía es una de las autonomías que no acudirá a las urnas, sí lo harán sus miles de municipios. Algunos, puntos clave como Sevilla. Sin embargo, el debate ya ha tomado carácter nacional, con el propio líder del Ejecutivo acudiendo a Doñana el mismo día en que se votaba la reforma de la ley del 'solo sí es sí'.

Tal y como adelantó Confidencial Digital, Ferraz ha decidido movilizarse para sacar rédito político de la crisis sobre la sequía y el cuidado del Parque natural. Incluso el Ministerio de Transición Ecológica tenía preparado un '155 ecológico' parta intervenir las competencias de la reserva, como informó ECD.