ERC garantizó la abstención a Sánchez tras pactar una “escenificación” por la inhabilitación de Torra

El vicepresidente Pere Aragonès confirmó al líder socialista que Esquerra no cambiaría su posición, pero reclamó un posicionamiento crítico de PSOE y Podemos hacia la Junta Electoral

Image de torra en un reciente rueda de Prensa
Torra y Aragones.

ERC se abstendrá y hará presidente a Pedro Sánchez. Así lo anunció este sábado la dirección del partido tras reunirse de urgencia en Barcelona mientras en el Congreso el jefe del Ejecutivo en funciones pronunciaba su discurso de investidura. El líder del PSOE había recibido garantías del aval definitivo de Esquerra once horas antes.

El debate de investidura más convulso de los últimos años comenzó este sábado tras la sacudida de la Junta Electoral Central (JEC) al proponer la destitución de Quim Torra y establecer que Oriol Junqueras no puede recoger su acta de eurodiputado.

A última hora del viernes, ERC convocó de urgencia su Ejecutiva Nacional para analizar la decisión de la JEC de inhabilitar al president en vísperas del inicio del pleno.

ERC mantuvo el suspense para justificarse

Con esa convocatoria extraordinaria, los republicanos se reunieron este sábado por la mañana con el objetivo de “coordinar la respuesta y valorar sus consecuencias en el calendario político inmediato”.

Por si esto fuera poco, tras el discurso de Pedro Sánchez en el Congreso, el portavoz Gabriel Rufián dejaba en el aire aún la abstención de ERC a la investidura, al tiempo que insistía en que el sentido del voto lo decidiría la Ejecutiva que se estaba celebrando en Barcelona en ese momento, evitando encarar la pregunta de los periodistas.

La reunión de la ejecutiva, un “mero trámite”

Sin embargo, esa reunión de la ejecutiva de ERC era un “mero trámite” y formaba parte de una “escenificación”, con la que estaba de acuerdo el PSOE. Una maniobra dirigida a justificar públicamente a los republicanos en su aval a Pedro Sánchez.

Pese a la inhabilitación de Torra, en la dirección de ERC pesaba más la voluntad de conservar el acuerdo alcanzado con los socialistas que la presión del independentismo radical, que acusa a los de Oriol Junqueras de “traidores” por facilitar la investidura de Sánchez con su abstención.

Según ha podido confirmar Confidencial Digital por fuentes socialistas conocedoras de las conversaciones, la decisión fue comunicada personalmente por el propio vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, al candidato socialista en una conversación telefónica en la noche del viernes.

Aragonès anticipó a Sánchez que Esquerra no cambiaría su posición en la votación de este martes, en la que el presidente en funciones necesita la abstención de los republicanos para ser investido.

 

Un gesto crítico hacia la Junta Electoral

A cambio del aval en la investidura, Pere Aragonès reclamó a Pedro Sánchez un “gesto crítico de PSOE y Podemos hacia la Junta Electoral”. Un movimiento necesario, argumentaron, para resistir la presión del sector más radical del partido y de los máximos defensores de Torra y Puigdemont.

El vicepresidente de la Generalitat también solicitó un “posicionamiento claro de los socialistas catalanes defendiendo a Quim Torra” en el pleno que celebró el Parlament este sábado para “ratificar” al president de la Generalitat, después de que el viernes el jefe del Ejecutivo catalán lo solicitara de urgencia tras conocer su inhabilitación.

El PSOE lanzó a Lastra contra la JEC

Eso fue lo que provocó que, minutos después de conocerse la inhabilitación de Torra, el PSOE lanzara a su portavoz parlamentaria a criticar la decisión de la Junta Electoral Central.

La vicesecretaria general del partido, Adriana Lastra, declaró ante los medios de comunicación que esperaba que el Tribunal Supremo respondiera “cuanto antes” a la decisión de la JEC. Y llegó a advertir de que tenía “serias dudas” de que la Junta Electoral fuera competente para adoptar este tipo de decisiones. Una afirmación que provocó un enorme revuelo entre los partidos de la oposición.

No se vio procedente, en ningún caso, que ni el presidente en funciones Pedro Sánchez, ni tampoco el futuro vicepresidente Pablo Iglesias, protagonizaran un ataque tan directo contra un órgano administrativo del Estado. Esa opción fue descartada.

Guiño a los políticos presos y exiliados

No obstante, el líder de Podemos sí tuvo un gesto con los independentistas este sábado desde la tribuna del Congreso, desde donde llegó a agradecer a los dirigentes soberanistas “en prisión y en el exilio” que hayan “trabajado para el acuerdo”.

También el candidato socialista asumió el lenguaje de Esquerra durante su discurso de investidura, cuando planteó “retomar la senda de la política dejando atrás la judicialización del conflicto”. Habló también, de forma velada, de agravios de la justicia.

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