Cinco informaciones que han llegado al Gobierno concluyen que la situación de los cooperantes secuestrados en Mali es peor de lo que se pensaba

Ha pasado casi un mes y medio desde que los tres cooperantes españoles fueron secuestrados por Al Qaeda en Mauritania. Sólo se sabe que “están bien”, recluidos en algún punto de Mali. Y casi nada más. Mientras, al Gobierno le han llegado cinco informaciones que hacen temer que su situación es peor de los que se pensaba.

El Confidencial Digital ha podido charlar telefónicamente con un diplomático español en la zona, que por tanto conoce con detalle los movimientos que el ministerio de Miguel Ángel Moratinos ha ido realizando sobre este asunto, y explica las cinco claves de ese pesimismo actual:

-- Los secuestradores aún no han pedido dinero por ponerlos en libertad: En los secuestros protagonizados por Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) que se solucionaron mediante el pago de un rescate, tardaron dos o, a lo más, tres semanas en anunciarlo y comunicar la cuantía del importe. En el caso de los españoles, “ya llevamos más de un mes”.

-- El caso de Camatte: Que los terroristas hayan reclamado la liberación de cuatro islamistas a cambio de la liberación del ciudadano francés Camatte, también secuestrado, “preocupa, y mucho” a los diplomáticos españoles, porque “no se esperaba que estos secuestros tuvieran objetivos políticos”.

-- La implicación de Mali: El hecho de que los terroristas hayan querido implicar en ese secuestro a Mali, uno de los países africanos con mejores relaciones con Francia, no pasa inadvertido para Exteriores. Cuando Al Qaeda pide contrapartidas de liberación de presos, “lo hace tratando de implicar a dos países aliados porque eso facilita las gestiones”. En el caso de España, en los ámbitos diplomáticos se especula con que, si exigen la liberación de presos, podrían ser activistas encarcelados en Mauritania o en Argelia. Muy importante en este último caso fue la reciente visita de Buteflika, presidente argelino, a la Moncloa, evidenciando las buenas relaciones entre los dos países.

-- Sin noticias del herido: España no ha recibido noticias, ni directas ni indirectas, sobre el estado de Albert Vilalta, el cooperante catalán que recibió un disparo en la pierna al tratar de escapar, y para quien Exteriores ha enviado medicinas y material de primeros auxilios a través de un enlace tuareg. No hay una explicación clara sobre este ‘silencio’.

-- El punto de esperanza que aún mantienen los negociadores españoles sobre el terreno es el número de secuestrados: Mientras que el francés sólo es uno, los españoles son tres, por lo que el rescate económico que se podría pedir resulta mucho más alto. Algo que seguramente estén valorando los secuestradores.

Como es conocido, Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) ha dado al gobierno de Nicolás Sarkozy un plazo de veinte días para que Mali suelte a cuatro presos yihadistas recluidos en sus prisiones, como contrapartida a la liberación de Pierre Camatte.

 

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