Iván Redondo conspira para desbancar en el PSOE a José Luis Ábalos y colocar a Francisco Salazar

El jefe de gabinete trata de rentabilizar el éxito del ‘efecto Illa’ y maniobra para ganar también Madrid. Está aprovechando las horas bajas del ministro por el fracaso en Murcia y el caso Plus Ultra

Iván Redondo en la Comisión Mixta de Seguridad Nacional
Iván Redondo en la Comisión Mixta de Seguridad Nacional

Iván Redondo ha tomado el mando de la campaña del PSOE en Madrid. Una operación avalada por Pedro Sánchez, pero que el jefe de gabinete del presidente intenta aprovechar también para ‘asaltar’ Ferraz. El plan es desbancar a José Luis Ábalos y colocar a Francisco Salazar como secretario de Organización.

El gesto de Salvador Illa, con su agradecimiento público, confirmó tras las elecciones catalanas el rol principal que había jugado Redondo, tanto en la operación para retirar a Miquel Iceta y colocar como candidato al ex ministro de Sanidad, como en el diseño y desarrollo de la propia campaña electoral.

Pese a que el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno permaneció la mayor parte de la campaña apartado, tras dar positivo por coronavirus, la cuarentena no le impidió enviar instrucciones y consignas desde su domicilio, y estudiar y planificar al detalle las comparecencias públicas del candidato del PSC, que consiguió ganar las elecciones.

“Será lo que quiera Pedro Sánchez”

Tras el éxito de la ‘operación Illa’, y las maniobras que lleva a cabo también ahora para ganar las autonómicas del 4 de mayo en Madrid, Redondo busca aprovechar los éxitos electorales para aumentar a corto plazo su poder en Ferraz, según aseguran a Confidencial Digital dirigentes del PSOE conocedores de esos movimientos.

Redondo va a ser en el PSOE lo que quiera Sánchez, porque el secretario general lidera el partido sin escuchar a nadie”, afirma un veterano dirigente socialista. 

Nombrar al secretario de Organización

Por eso, según altos cargos de la Ejecutiva del PSOE, las batallas internas se van a trasladar en los próximos meses a los segundos y terceros escalones del poder orgánico

Destacan que la principal lucha que se avecina se va a dar por el control de la Secretaría de Organización, que actualmente ocupa el también ministro de Transportes, José Luis Ábalos.

El PSOE celebrará el Congreso Federal en octubre. Sánchez será reelegido secretario general por aclamación, pero tendrá que renovar su ejecutiva. Y es ahí donde se esperan cambios importantes.

El pulso entre Iván Redondo y Ábalos

En el PSOE aseguran que Ábalos y Redondo nunca han escenificado discrepancias en público. Es más, la versión que trasladan a los medios es que son “uña y carne”. Sin embargo, frente a esa idílica sintonía, fuentes de la Ejecutiva socialista reconocen que existe una sorda pugna entre ambos.

 

Aseguran que Redondo no oculta en privado que prefiere un secretario de Organización más próximo a las estrategias que se cocinan en Moncloa. Incluso, en el PSOE apuntan que ya cuenta con un candidato al cargo: su mano derecha en Presidencia, Francisco Salazar.

Salazar es director adjunto del Gabinete de la Presidencia del Gobierno y secretario ejecutivo de Acción Electoral del PSOE.

Iván Redondo cree que en los próximos meses, tras el éxito en Cataluña y lo que pueda pasar en Madrid, puede convencer a Pedro Sánchez de que ese cambio es el más adecuado para mejorar la coordinación de mensajes entre Ferraz y Moncloa.

Los éxitos en las campañas como aval

Por si esto fuera poco, el jefe de gabinete de Sánchez considera también que su “acierto en Cataluña” le permite por ahora acallar las duras críticas que recibió desde el PSOE tras aconsejar al presidente la repetición de las elecciones generales el 10 de noviembre de 2019. 

Provocó que el partido perdiera escaños, cuando Redondo había basado la defensa de esa opción asegurando que el PSOE mejoraría y así rebajaría la influencia de Podemos de cara a la formación de Gobierno

Culpa a Ábalos del fracaso de las mociones

Mientras tanto, la mano derecha de Sánchez considera que el ministro Ábalos se encuentra en estos momentos en horas bajas por el fracaso de la moción de censura en Murcia.

Asegura que lo que parecía una operación perfecta, en la que él afirma que simplemente fue informado porque se lanzó desde Ferraz, se ha convertido en un problema importante que trastoca la estrategia del presidente. 

Redondo reparte las culpas entre el secretario de Organización del PSOE y el director general de Presidencia, Félix Bolaños, quien mantuvo las conversaciones con el número dos de Inés Arrimadas, Carlos Cuadrado.

Polémico rescate de la aerolínea Plus Ultra

Además, el jefe de gabinete del presidente del Gobierno no pasa por alto que José Luis Ábalos aparece claramente implicado estos días en el escándalo por el rescate de la aerolínea Plus Ultra.

Mientras Ábalos negaba cualquier vínculo del Ministerio de Transportes con el rescate a Plus Ultra, el lunes el diario El Mundo adelantaba que la SEPI tuvo en cuenta un informe de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) a la hora de conceder los préstamos a la aerolínea. Una entidad que depende de la cartera que dirige el propio Ábalos.

Con todo, las sospechas de la oposición de que el rescate ha sido más por razones políticas y ‘amiguismos’ que por un sentido estratégico para la economía española, han ido en aumento en los últimos días.

Se han puesto de manifiesto también los lazos entre la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez -con quien Ábalos se reunió en Barajas en enero de 2020- y la compañía Plus Ultra. Según contó Vozpópuli, el enlace entre la segunda de Maduro (Camilo Ibrahim Issa) y tres de los accionistas de Snip Aviation, sociedad que más participaciones posee en Plus Ultra, se muestra patente en el registro mercantil.

Ábalos, en el núcleo de poder de Sánchez

Pese a las maniobras de Iván Redondo, fuentes próximas a Ferraz recuerdan que José Luis Ábalos continúa formando parte del círculo de confianza de Pedro Sánchez, pese a que el presidente ha desplazado cada vez más el centro de gravedad de su actividad en el Gobierno de Ferraz a La Moncloa.

No obstante, Ábalos está integrado en ese estrecho núcleo de poder en el que se encuentran también Carmen Calvo y la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, además del responsable de Coordinación Territorial, Santos Cerdán. Aquellos que en su día le acompañaron en la dura travesía para recuperar la secretaria general del partido.

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