El PP ofrece a C’s la presidencia del Parlamento andaluz a cambio de que no veten a Vox

Al Partido Popular y Ciudadanos se les acaba el tiempo. El jueves, 27 de diciembre, se constituirá el nuevo Parlamento andaluz y, por tanto, concluirá el plazo para llegar a un acuerdo sobre la composición de la nueva Mesa. Y, a falta de apenas cinco días, ninguno de los dos partidos ha dado su brazo a torcer.

A día de hoy, tal y como confirman a Confidencial Digital desde ambas formaciones, las posiciones siguen alejadas.

Por un lado, el PP quiere negociar a la vez una especie de “pack”: composición de la Mesa del Parlamento y del futuro Gobierno. Ciudadanos, sin embargo, prefiere abordar cada una de esas cuestiones por separado.

Vox quiere la presidencia

Además, el papel que pueda jugar Vox en esos posibles acuerdos divide a ambos interlocutores. Este partido, abiertamente contrario al estado autonómico, no va a exigir consejería alguna para entrar en la Junta, pero han trasladado al PP que sí quieren conseguir un “papel importante” en el órgano de gobierno del Parlamento.

Ese “papel importante”, afirman las fuentes consultadas, no es otro que la presidencia de la Cámara regional. Una petición que, según las fuentes consultadas, Pablo Casado y Juanma Moreno estarían dispuestos a aceptar, pero que ha sido totalmente rechazada por parte de Albert Rivera y Juan Marín, que no quieren tener a Vox en un puesto tan relevante.

El PP propone una solución alternativa

Ese veto a Vox por parte de Ciudadanos es considerado por el PP como una “oportunidad” para ofrecer al partido naranja una última propuesta que pueda desbloquear las negociaciones in extremis: que sean los de Albert Rivera los que presidan el Parlamento.

Ciudadanos, afirman desde el PP, “da una importancia vital” a ese puesto y, por ese motivo, podría “abrirse” a aceptar una composición de la Mesa en la que todos los partidos con representación en la Cámara tengan asiento, incluido Vox.

Los populares sostienen que, atendiendo a los resultados electorales, lo lógico es que PSOE y PP ocupen dos asientos cada uno, y que los tres restantes, hasta completar las siete plazas, sean para Ciudadanos, Adelante Andalucía y Vox.

La clave: aceptar el voto de Vox

Ese reparto, añaden desde el PP, “gusta a Ciudadanos”. Sin embargo, hay otro escollo que salvar: que el partido naranja acepte que Vox le vote para presidir el Parlamento... y para blindar la composición de la Mesa pactada con los populares.

En Génova se muestran optimistas con esta oferta, ya que C´s ha constatado que el PSOE no va a abstenerse, y por tanto tendrá que admitir los votos a favor de Vox para evitar una situación de bloqueo político: “Están ante su gran oportunidad y no la van a desaprovechar”.

Otra cosa, reconocen en el PP, será la negociación de la composición de la Junta, donde Ciudadanos se ha mostrado más contundente en el rechazo a cualquier “ayuda” de Vox. No obstante, afirma una persona muy próxima a Casado, “al final deberán ceder, porque puede haber generales en unos meses y nadie les perdonará que den una segunda oportunidad a los socialistas en Andalucía”.