Las pelotas de goma impidieron que Moncloa anunciara el fin de la ley mordaza este martes
El PSOE ha negociado con Bildu y ERC en las últimas semanas. Los independentistas y Sumar exigieron la derogación completa de la norma y los socialistas se plantaron
- Semanas de negociaciones
- Las injurias a la corona y ofensas a sentimientos religiosos, un punto medio
- Un acuerdo de Gobierno para esta legislatura
El Partido Socialista ha negociado en los últimos días la derogación total de la llamada 'ley mordaza' con EH Bildu y Esquerra Republicana, los dos partidos que tumbaron su reforma en la legislatura pasada. Los socialistas han retomado las conversaciones en las últimas semanas para incluir la medida en el paquete de regeneración "por la democracia" anunciado este lunes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y aprobado este martes por el Consejo de Ministros.
La Comisión de Interior del Congreso de los Diputados abordó la norma de Seguridad Ciudadana aprobada por el anterior Ejecutivo del Partido Popular, liderado por Mariano Rajoy. Sin embargo, ERC, Bildu y Unidas Podemos exigieron suprimir al completo la ley, pero el PSOE se negó. Las conversaciones se prolongaron durante meses, pero se enquistaron en el debate sobre el fin de las bolas de goma. Mientras los socialistas defienden su uso, el resto de formaciones —socios parlamentarios habituales del Ejecutivo— exigieron su sustitución por las bolas de foam. Una línea roja que continúa vigente.
Semanas de negociaciones
Los socialistas no solo se han reunido con Sumar, también lo han hecho con las formaciones independentistas que se oponen a la 'ley mordaza'. Todos los partidos llevan semanas en conversaciones que se han intensificado en los últimos días. El Gobierno pretendía anunciar cualquier avance en la reforma de la ley este martes en el Consejo de Ministros.
Sin embargo, solo han podido acordar dos modificaciones del Código Penal para eliminar las injurias a la corona y las ofensas por delitos religiosos. Sumar, ERC y Bildu exigieron eliminar la reforma sin excepciones, incluyendo las pelotas de goma. Pero los socialistas continúan abogando por no eliminarlo todo, sino retocar los "aspectos más lesivos". Los contactos entre los cuatro partidos se han sucedido sin llegar a concretar nada más que lo anunciado por la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, antes del verano.
Las injurias a la corona y ofensas a sentimientos religiosos, un punto medio
El PSOE ni siquiera considera 'ley mordaza' las reformas del Código Penal para que los insultos a la corona o a las religiones dejen de estar tipificadas como delito; pero en el ala socialista del Ejecutivo saben que los socios sí lo engloban dentro de las medidas que coartan la libertad de expresión.
Los socialistas estaban de acuerdo desde el inicio en cambiar sendos artículos, pero supeditan el resto de reformas a la negociación parlamentaria con el resto de grupos. Precisamente, el apoyo de ERC y Bildu a estas reformas han felicitado el visto bueno del PSOE. En el Gobierno no quieren más votaciones perdidas y no llevarán ninguna reforma de la norma al Congreso de los Diputados hasta que tengan amarrados 176 síes.
Un acuerdo de Gobierno para esta legislatura
En Sumar la decepción es creciente. El acuerdo de Gobierno de la pasada legislatura entre el PSOE y Unidas Podemos ya recogía la derogación de la ley de Seguridad Ciudadana, pero los socialistas terminaron echándose atrás. El texto de la coalición entre los socialistas y Sumar recoge el mismo objetivo que no se quebró en 2023 con el "no" de ERC y Podemos.
En la formación liderada por Yolanda Díaz reiteran que esta vez el acuerdo se cumplirá y se abordará la reforma de la 'ley mordaza' antes de 2027. "Está en el acuerdo y lo tienen que cumplir", aseguran altos cargos desde Sumar.