El PSOE pacta con Ciudadanos, ERC y PNV poner a prueba la ruptura del PP con Vox
Han acordado “acorralar” a los populares en el debate sobre el estado de alarma para visibilizar que vuelven a estar “atrapados por la ultraderecha”
Todos contra el PP. Esa es la estrategia que el Gobierno y sus socios, a los que también se suma ahora Ciudadanos, han acordado de cara al pleno sobre la prórroga del estado de alarma para poner a prueba la ruptura de Pablo Casado con Vox y dejar en evidencia que, con la abstención, los populares vuelven a estar “atrapados por la ultraderecha”.
Por lo pronto, el cara a cara entre Pedro Sánchez y Casado en la sesión de control en el Congreso de este miércoles era el primero desde el debate de la moción de censura de Vox la semana pasada, en el que el dirigente popular se desmarcó de la ultraderecha con un duro discurso.
El nuevo cruce dialéctico entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición siguió el rumbo normal de las sesiones de las últimas semanas y meses, como si no se hubiese producido el giro estratégico hacia la moderación y la centralidad que tanto se elogió hace una semana.
Pero la discusión no fue ni bronca ni crispada, pero sí desde posiciones totalmente distanciadas.
Sirvió también como aperitivo del debate de este jueves sobre el nuevo estado de alarma y su prórroga, para el que el Gobierno y el PSOE aún están buscando apoyos, ya que por ahora apenas cuentan con los seis diputados añadidos del PNV a los 155 de socialistas y de Unidas Podemos.
Poner a prueba la ruptura de Casado con Vox
Fuentes conocedoras de la estrategia de Moncloa, a las que ha tenido acceso Confidencial Digital, explican que el PSOE ha acordado “acorralar” al PP con los grupos políticos que han mostrado su disposición a apoyar la prórroga del estado de alarma.
El PP ha decidido abstenerse en la votación de este jueves en el Congreso pero denunciara a Pedro Sánchez en Europa por la falta de control parlamentario. Los socios del Gobierno se esforzarán en visibilizar que el PP vuelve a estar “atrapado por la ultraderecha”.
Van a pasar de tildar de “abusivo” el estado de alarma de seis meses a apoyarlo este jueves a cambio de una mera comparecencia bimestral, sin otro efecto sobre la prórroga que el de debatir sobre ella.
Por si fuera poco, el PP intentó un pacto con los socios parlamentarios del Ejecutivo para que Sánchez rindiera cuentas al menos una vez al mes. Pero Moncloa también neutralizó ese intento de Casado, pactando con ERC, Más País y Compromís que el presidente comparecerá cada dos meses, pero sin votar de nuevo la prórroga.
Gobierno y Vox se lanzan a hacer la ‘pinza’ al PP
La recuperación del liderazgo del centro derecha iniciada el pasado jueves por el presidente del PP, Pablo Casado, ha llevado al Gobierno y a Vox a reajustar su estrategia.
El giro ha quedado patente este miércoles en el Congreso donde ambos salieron a atacar a los populares haciéndoles una ‘pinza’ política. De un lado, el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, acusaba al partido de Casado de formar parte de la entente de los socialistas y comunistas.
De otra, el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, acusaba a los populares de estar “atrapados por la ultraderecha”.
