Sánchez anuncia un mando único para el control de la inmigración en el Estrecho

Es la primera rueda de prensa que ofrece Pedro Sánchez desde su llegada al poder a principios de junio. Ha aprovechado la comparecencia tradicional de ‘fin de curso’ para reivindicar su gobierno, asegurando que “hoy los ciudadanos se reconocen” en él.

Sánchez, que hablo de su “hoja de ruta hasta el final de la legislatura”, dejando claro que no tiene previsto la convocatoria de elecciones anticipadas, realizó un anuncio significativo sobre cambios que se preparan en el control fronterizo ante la crisis de inmigración.

En concreto, el gobierno creará un “mando único” para todas las fuerzas de Seguridad del Estado, con el objetivo de lograr la “coordinación operativa y no política” en el control de fronteras “y en el Estrecho”.

Este mando “centralizará la coordinación y el seguimiento de las actuaciones vinculadas con la inmigración ilegal”. Esa es la respuesta gubernamental a la crisis que se vive desde hace unas semanas en la frontera sur de España, donde se ha disparado la presión migratoria y se han vivido escenas de gran tensión como las registradas en Ceuta con el salto de 602 subsaharianos.

Además, ha hecho referencia al plan de choque de 30 millones de euros para hacer frente al aumento de la llegada de inmigrantes, que según explicó Sánchez ya se preveía con el anterior gobierno y no responde a un “efecto llamada”.

Por otra parte hablo de la cooperación europea y la necesidad de que la Unión se comprometa con España en materia de inmigración, ya que “cuando un inmigrante pisa una playa de Cádiz, no pisa España sino la Unión Europea”.

En ese sentido, tal y como contó Confidencial Digital, Sánchez ha logrado que Junker envíe al comisario Dimitris Avramopoulos para que vea in situ la situación en la que se encuentran los centros de internamiento de inmigrantes. El objetivo es obtener nuevas ayudas financieras para el control de fronteras y la gestión humanitaria del fenómeno.