El secuestro del Alakrana, primera ‘prueba de fuego’ de boinas verdes de la Armada. “Estamos preparados para operaciones con rescate de rehenes y operaciones de abordaje”

La Fuerza de Guerra Naval Especial es una unidad de reciente creación. De hecho, el secuestro del Alakrana fue su primera misión oficial. Meses antes, en una entrevista, el Coronel jefe de la unidad recordaba que la FGNE estaba preparada para “el rescate de rehenes y el abordaje de embarcaciones con oposición”.

La persecución y no captura de los corsarios que mantuvieron secuestrado durante 47 día al buque vasco ha generado todo tipo de comentarios –negativos, en su mayoría- sobre la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas. Unas opiniones que, a su vez, han despertado el malestar de quienes participaron en la operación, y en general de quienes conforman las Fuerzas Armadas españolas.

“No nos pueden culpar de falta de preparación” comenta a El Confidencial Digital un miembro de la Unidad. De hecho, tal y como reconocía el coronel Hertfelder -al mando de la FGNE- en una entrevista con motivo del nacimiento del grupo, “estamos preparados para operaciones de rescate de rehenes y operaciones de abordaje con oposición”.

La FGNE aglutina al Mando de Guerra Naval Especial, a la Unidad Especial de Buceadores de Combate y a la Unidad de Operaciones Especiales de Infantería de Marina. El rescate del Alakrana fue su primera ‘prueba de fuego’. Tras más de un mes desplegados en el Índico, la vuelta a la Estación Naval de La Algameca, su base de operaciones, ha sido “agridulce”.

Agridulce porque allí fue donde se entrenó y donde se celebró el acto de nacimiento de la Unidad, durante el cual, se les impuso la boina verde que representa la pertenencia al grupo de Operaciones Especiales. A su vuelta de Somalia, siendo recibidos por el AJEMA –Almirante Jefe de la Armada- Manuel Rebollo, han tenido que enfrentarse a las duras críticas de la opinión pública. No se sintieron “bienvenidos”. Y el recibimiento del AJEMA, “un paripé”.

Pero los miembros de la FGNE son conscientes de que su preparación para enfrentarse a este tipo de actuaciones era “muy amplia”. Culpan del fracaso de la operación a la cadena de mando, y asumen que las restricciones de combate impuestas desde Madrid les restaron operatividad

Una operatividad “mutilada y limitada” por las restricciones de combate que impone la Operación Atalanta y que los mandos de Defensa siguen a rajatabla, como también ocurre –así lo han puesto de manifiesto- en los contingentes militares desplegados en Líbano y Afganistán –vea aquí un ejemplo-.

Pero, insiste, “nada que ver con nuestra preparación”.La FGNE, según el jefe de la Unidad, tiene una capacidad ‘extra’, es decir, un adiestramiento y unos medios específicos para desarrollar operaciones de contraterrorismo marítimo, ataque a buques, rescate de rehenes, y “operaciones que impliquen el mayor riesgo y especialización, como los abordajes con oposición”.

“La FGNE aporta unidades altamente preparadas, adiestradas y alistadas que les proporcionan una excelente movilidad y discreción en Operaciones Especiales, permitiéndola operar en la mar o en tierra adentro, indistintamente” asegura el coronel al mando.

 

Video del día

Marta Rovira confirma que negocia con Sánchez
un referéndum de independencia para Cataluña
Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato