El toque de queda que propone el Gobierno incluye la suspensión del transporte público

El Gobierno trabaja ya en las medidas concretas para la aplicación del toque de queda. El objetivo es reducir la movilidad y las interacciones sociales entre unas horas determinadas especialmente de la noche. El Ejecutivo planteará, sobre todo en las grandes ciudades con más incidencia, una disminución casi total del transporte público.

Según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes del Gobierno, el plan en el que trabaja el Ministerio de Sanidad persigue que “a los ciudadanos no les quede más opción que pasear o irse a sus casas” desde la hora determinada de la noche que se acuerde con las autonomías para el toque de queda.

El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha afirmado que prepara una orden para restringir la movilidad desde la medianoche a las 6 de la mañana cuando el sábado finalice el estado de alarma tras dos semanas de vigencia

El presidente valenciano, Ximo Puig, ha también ha defendido esa medida. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, ya pidió el martes “medidas restrictivas e iguales para toda España” y aseguró que estaría dispuesto a aceptar el toque de queda si se decide de forma unánime en la reunión interterritorial que se celebra este jueves. El lehendakari Iñigo Urkullu también ha abierto la puerta al establecimiento de un toque de queda.

Mientras, las tres capitales aragonesas, Zaragoza, Huesca y Teruel, han quedado confinadas perimetralmente desde la pasada medianoche, según ha decidido este miércoles el Gobierno autonómico. También La Rioja ha acordado restringir la entrada y salida de la comunidad a partir del viernes. Se suma así al confinamiento de Navarra.

Un pacto con las autonomías

En las últimas horas, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha evitado confirmar que la Comunidad se plantee un toque de queda bajo un estado de alarma o de excepción. Ha defendido que se limite la actividad económica y social nocturna para evitar fiestas privadas, donde se producen la mayoría de los contagios.

Según ha podido confirmar Confidencial Digital por fuentes próximas al Ministerio de Sanidad, el Gobierno está estudiando el encaje legal que podría tener un toque de queda en toda España para frenar el avance de los contagios.

Pero en el Ejecutivo insisten en que se trata de un debate que todavía está abierto, supeditado al diálogo y a un pacto con las comunidades autónomas sobre la franja horaria, y que no tendría que afectar tampoco a todo el territorio nacional.

Suspender el transporte público

Según las fuentes consultadas por ECD, el plan del departamento que dirige Salvador Illa pasa por una reducción drástica de plazas en el transporte público durante el toque de queda, que deje la oferta por debajo del 30% habitual a esas horas.

En el Gobierno se tiene en cuenta que la entrada en vigor, el pasado 9 de octubre, del estado de alarma en Madrid y en otros ocho municipios de la Comunidad, apenas se ha notado en la movilidad, que únicamente se ha reducido un 0,4%.

En cambio, sí ha aumentado el uso del transporte público en la capital. Los estudios comparativos en las últimas semanas, con datos de la Consejería de Transportes de la Comunidad, revelan que el estado de alarma no se ha traducido por tanto en menos movimiento de los madrileños, una de las claves para doblegar la curva de contagios.

Hasta ahora, el consejero de Transportes de Madrid, Ángel Garrido, insistía en que es “imposible” reducir al 30% el aforo en el transporte colectivo, como plantea el borrador que propone el Ministerio de Sanidad para controlar al expansión del coronavirus, porque “ningún sistema de transporte es capaz de funcionar” con esa capacidad.

“Nadie tiene escondidos 500 trenes de Cercanías ni 500 vagones de Metro; podemos hacer pequeños ajustes, pero no garantizar una sobrecapacidad el 60%”, ha señalado esta semana. Desde Sanidad responden ahora que, si se imponen restricciones a la movilidad, esa reducción de aforos en el transporte colectivo sí podrá llevarse a cabo.

Moncloa impone el estado de alarma

Además, Moncloa ha dejado claro que solo aceptará un toque de queda con una declaración del estado de alarma que cuente con los apoyos parlamentarios necesarios, en alusión del PP, por si fuera necesario prorrogarlo. Considera que, solo bajo ese paraguas legal, es posible establecer límites a la libertad de circulación durante unas horas del día.

Así lo confirman a Confidencial Digital fuentes del Gobierno respecto al debate que existe sobre esta medida y a la concreción de si debe utilizarse el estado de alarma o el de excepción, tal y como recoge la ley vigente, la Orgánica 4/1981.

Adoptado en Francia y Bélgica

En Francia y Bélgica han adoptado este modelo por ciudades y para todo el territorio nacional, mientras Italia ha delegado esta decisión en las regiones. París, por ejemplo, prohíbe su circulación y los movimientos de los ciudadanos entre las 21:00 y las 07:00. Bélgica lo hace menos horas: en la horquilla que transcurre desde las 00:00 a las 5:00.

Por su parte, Lombardía acaba de decretar el toque de queda para todo el territorio. Se da la circunstancia de que esta región italiana fue la primera donde asaltó en Europa con virulencia el coronavirus el pasado mes de marzo, 15 días antes de su llegada a España, lo que ahora podría ser un precedente.