La Iglesia española atenderá a los inmigrantes latinos en Europa, a través de las Misiones Católicas creadas en los años 60

La atención pastoral a los inmigrantes latinoamericanos que viven y trabajan en Europa correrá a cargo, de modo organizado y oficial, de la Iglesia española, que aprovechará para ello las Misiones Católicas creadas en los años 60 con el fin de ocuparse de los trabajadores emigrados desde la Península.

En esa década, con los cientos de miles de españoles que marcharon a Europa en busca de trabajo, partieron también sacerdotes enviados por la Conferencia Episcopal para ocuparse de su atención religiosa. Hoy son 110 los que dirigen esas capellanías por Francia, Alemania, Bélgica, Holanda, Suiza, Reino Unido y Luxemburgo.

A partir de ahora, de modo oficial, se ocuparán también de atender a los más de 100.000 latinos que viven  trabajan en esos países. La iniciativa ha sido de las capellanías, y la Iglesia española, de acuerdo con los obispos europeos y los latinoamericanos, ha aceptado el encargo de que sean sus parroquias de referencia. El idioma común, unido a la experiencia de los sacerdotes que trabajan en esos países, hace que sea la solución más natural.

Las Misiones Católicas de Lengua Española creadas en Londres, Berna, Berlín París, o Amberes ya estaban recibiendo, desde 2002, a los católicos latinoamericanos, que espontáneamente acudían a ellas para participar en las misas y mantener viva su fe a miles de kilómetros del país de origen.

De los 110 sacerdotes, muchos son diocesanos pero hay también religiosos jesuitas, claretianos, dominicos o carmelitas descalzos, dependientes todos de la Comisión Episcopal de Migraciones, que preside el obispo de Sigüenza-Guadalajara, José Sánchez. Hace pocos meses, monseñor Sánchez envió tres sacerdotes para reforzar las Misiones Católicas de Bélgica y Alemania. Estos 'misioneros europeos' no están incardinados en las diócesis donde trabajan, aunque trabajan en coordinación con ellas.

Entre los capellanes, hay ya sacerdotes latinoamericanos, y de hecho, la Comisión de Migraciones está planteando a obispos del continente americano que envíen sacerdotes para mejorar la atención de las capellanías, puesto que han visto un aumento importante de la afluencia de feligreses latinoamericanos.

Según datos de Eurostat, en 2007 vivían en Alemania 10.500 colombianos, 9.000 mexicanos, 5.000 ecuatorianos y 6.000 chilenos; en Holanda, 2.000 colombianos y unos 1.000 peruanos; en Francia viven (datos de 2005), 4.500 mexicanos, 3.700 argentinos, 10.200 colombianos, 4.500 chilenos, y unos 5.000 peruanos; en Bélgica (datos de 2003), sin contar a los brasileños, la mayoría son chilenos (1.275), colombianos (1.280) y ecuatorianos (1.276); en Reino Unido (2004) viven 3.500 chilenos, unos 14.000 colombianos, y 1.350 venezolanos; y en Suiza (datos 2007), unos 40.000 ciudadanos latinoamericanos.

 

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