El Vaticano no tiene previsto invitar al ex director de los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel, a la canonización de su tío abuelo

En México se está estos días muy pendiente de la posible reaparición del que fuera director de los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel. El próximo día 15, Benedicto XVI presidirá los actos de canonización del primer obispo latinoamericano, en la Plaza de San Pedro. Según fuentes vaticanas, a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital, la Santa Sede parece no encontrar ningún motivo para invitar al sacerdote mejicano.   Marcial Maciel fue apartado de su ministerio sacerdotal por la Congregación para la Doctrina de la Fe, de la que Benedicto XVI fue su máximo responsable durante 23 años. Una nota oficial de la Santa Sede del 19 de mayo de 2006 recogía la sugerencia de que el padre Maciel se dedicara a llevar “una vida reservada de oración y penitencia, renunciando a cualquier ministerio público”, tras renunciar a investigar –por motivos de edad- unas acusaciones sobre presuntos abusos sexuales en los años sesenta a seminaristas.   Expertos canonistas están analizando la posibilidad de que el fundador de los Legionarios de Cristo esté presente en la canonización de su tío abuelo Rafael Guizar y Valencia. Hay quien afirma que puede asistir sin vulnerar la medida disciplinar impuesta por el Vaticano, pero siempre y cuando lo haga a título personal. Por el contrario, otros analistas consultados por la Curia matizan que su asistencia incumpliría una sanción disciplinaria impuesta por el Papa y con plena vigencia.   Los Legionarios de Cristo son una organización fundada en México, en 1941, por Marcial Maciel Degollado. Actualmente tiene presencia en 18 países y cuenta con más de 600 sacerdotes y 2.500 seminaristas.