Alarma policial: la mafia marsellesa empieza a extenderse por España. Quiere el negocio de la prostitución en la costa mediterránea y está detrás del atentado de La Junquera

Quieren hacerse con el negocio de la prostitución y expandirse por toda la costa mediterránea. Los autores del intento de atentado con coche bomba en un club de alterne de La Junquera, en la frontera con Francia, pertenecen a la mafia marsellesa, muy violenta y relacionada con el tráfico de drogas y de armas.

El domingo, cinco encapuchados llegaron en un Porsche Cayenne y en un Opel Astra al club de alterne ‘Paradise’, el más grande de Cataluña y posiblemente de toda la zona fronteriza hispano-francesa, con este mensaje: “Vamos a hacer explotar un coche bomba”.

La mafia marsellesa

El aviso lo realizó al vigilante del local el conductor del Opel, que acto seguido dejó ese vehículo para subirse con sus otros cuatro compañeros en el Porsche, abandonando el vehículo que ocupaba. Ocultaba dos bombonas de butano, un kilo de TNT y dinamita, y cinco metros de mecha lenta.

Horas después, ya en la madrugada del lunes, los TEDAX pudieron desactivar el dispositivo y, después de las primeras pesquisas, la Policía apuntó que los autores de ese intento de atentado pertenecían a un grupo criminal organizado.

Pues bien, según ha sabido El Confidencial Digital, las investigaciones realizadas y los testimonios recogidos por los policías durante esta semana han llegado a la conclusión de que detrás de la colocación del coche-bomba se encuentra la mafia marsellesa, que ha querido de esta forma dar un ‘aviso’ a los empresarios de la noche gerundenses.

Quieren extenderse por la costa mediterránea

Según fuentes policiales consultadas por ECD, los marselleses “han crecido mucho durante los últimos años en el sur de Francia, y ahora quieren extenderse por España. Intentan hacerse con los grandes negocios de la prostitución en toda la costa mediterránea catalana”.

Para conseguirlo, “no dudan en utilizar la extorsión o la intimidación, como han intentado con José Moreno, el dueño del club ‘Paradise’”.

El propio Moreno “denunció hace tan solo unas semanas que unos desconocidos le habían lanzado una granada en la puerta de su local”, algo que hasta ahora no había trascendido a los medios.

 

No quiere ser socio

El objetivo de estos ataques es que venda a la mafia marsellesa ése y los otros negocios que regenta en la zona, o que por lo menos acepte hacer negocios con ellos, algo que de momento ha rechazado.

“Moreno sabe que está siendo investigado por la Policía española por posible inmigración ilegal de las chicas que tiene en el club y no quiere más problemas, aunque su postura no gusta a la mafia”.

De hecho, y teniendo en cuenta “el carácter y el modus operandi de este grupo”, los policías consultados no dudan en que “estos ataques han sido solo el principio. De momento se han centrado en el negocio del ‘Paradise’ porque es el más grande de Cataluña, pero pronto buscarán nuevos objetivos”.

Tráfico de droga y de armas

Además de ganar dinero con la prostitución y la gestión de locales de ocio nocturno, los capos de la mafia marsellesa tienen otros dos negocios fuera de la ley que les reportan grandes beneficios.

En concreto, y según la información transmitida desde Francia a la Policía española, “son gente que trafica con droga y con armas, que incluso venden en los locales que gestionan”.

Tampoco está descartado que formen parte de una red internacional de tráfico de mujeres, en el negocio conocido como ‘trata de blancas’, aunque los policías franceses no han logrado hallar pruebas definitivas que confirmen a ese tipo de delito.

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