El CNI monta un despliegue especial en Algeciras para vigilar la “Operación Paso del Estrecho”
Objetivo: impedir la entrada de islamistas radicales aprovechando el tránsito entre España y Marruecos
El pasado 15 de junio se puso en marcha la llamada "Operación Paso del Estrecho", que provocará constantes movimientos de entrada y salida, desde Algeciras a Marruecos, de inmigrantes africanos hasta la segunda semana de septiembre. Y, como todos los años, el Ministerio del Interior ha montado un importante dispositivo policial.
En total, participan en el operativo especial 21.000 personas, entre agentes de Policía y Guardia Civil, personal de Puertos del Estado, sanitarios, traductores y trabajadores de Cruz Roja. Todos ellos, con el mismo reto: gestionar el movimiento de más de 3 millones de personas y unos 700.000 vehículos entre Europa y África.
Más allá de evitar incidentes y garantizar el buen tránsito de pasajeros y mercancías, otro de los grandes retos del Estado es vigilar la posible entrada y salida de islamistas radicales, tal y como reconocen al Confidencial Digital agentes de los servicios de información.
Según estas fuentes, desde hace ya “algunos veranos”, y en pleno nivel 4 de alerta antiterrorista, existe “máxima vigilancia” para evitar que posibles yihadistas aprovechen los viajes a Marruecos, y sobre todo los de regreso a la Península, para asentarse en España y poner en marcha células para preparar atentados.
El CNI trabaja en la zona
Esa vigilancia especial no es responsabilidad de los 21.000 efectivos movilizados para la “Operación Paso del Estrecho”, sino de los servicios de información, y de inteligencia, del país.
Tal y como confirman a ECD fuentes conocedoras de ese “dispositivo alternativo”, es el CNI el que lidera, en la zona , un despliegue especial que se encarga, casi en exclusiva, de vigilar la entrada de islamistas radicales en el país.
Afincados en Algeciras, los agentes del Centro Nacional de Inteligencia reciben el apoyo de agentes especializados de los Servicios de Información de la Guardia Civil y de la Brigada Operativa de Apoyo de la Policía Nacional.
Todos ellos, explican las fuentes consultadas, actúan con total libertad y haciéndose pasar como vecinos o turistas de Algeciras. Su trabajo, añaden, es “esencial” para la detección de cualquier sospechoso.
Además, cuentan con una amplia base de datos de islamistas radicales ya fichados tanto por las fuerzas y cuerpos de seguridad españoles como de otros cuerpos policiales europeos. De esta forma, tienen capacidad para identificar cualquier tipo de amenaza y reaccionar rápidamente.
