Condenado un guardia civil de Tráfico por acusar de agresión a un agente que le exigió retirar una multa a su sobrina
El Supremo considera que no presentó pruebas o testigos que demostraran que le lesionó
El Tribunal Supremo ha ratificado la condena de un guardia civil por acusar sin pruebas a otro agente de agredirle. Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Confidencial Digital, no aportó pruebas ni testigos presenciales que corroboraran la acusación.
El supuesto agredido presentó el parte médico de Urgencias, en el que consta enrojecimiento en la muñeca y dolor del paciente. Sin embargo, para el TS, el informe demuestra que tuvo una lesión leve, pero no que fuera causada por un ataque del otro agente.
Por otro lado, el guardia civil presentó a cuatro compañeros que se encontraban en las dependencias de la Guardia Civil de Tráfico de Gandía, donde sucedieron los hechos, para que declararan como testigos.
Sin embargo, tanto la sentencia de primera instancia como la del Supremo rechazaron dichas testificales, ya que ninguno de los cuatro presenciaron la conversación entre los agentes.
Por tanto, el denunciante ha sido condenado a una multa de 3.000 euros por acusar falsamente a otro guardia civil de agredirle físicamente.
