Interior revisará los expedientes de 2.000 desapariciones para establecer patrones que ayuden a resolver futuros casos

Objetivo: predecir el resultado de la desaparición de una persona. El Ministerio del Interior pretende desarrollar un sistema que, en base a cientos de casos investigados, permita establecer unas pautas que pueden ser de utilidad para nuevos casos.

Confidencial Digital ha podido comprobar que, para ello, la Secretaría de Estado de Seguridad ha abierto una licitación que tiene por objeto contratar “un servicio de investigación científica sobre los mecanismos psicosociales que expliquen las desapariciones en España”.

En otro punto lo define como un “servicio de investigación científica sobre la creación y validación de una herramienta predictiva y de valoración del riesgo de desaparición con desenlace fatal (mortal)”.

Revisión de 2.000 atestados

La idea de la Secretaría de Estado de Seguridad es contratar a alguna empresa, organismo, entidad que cuente con expertos en el análisis científico de la conducta, especialmente de la conducta criminal (psicólogos y criminólogos, fundamentalmente), expertos en desapariciones, y expertos en metodología (análisis de datos).

Ese equipo se encargaría de realizar “una revisión, lectura, vaciado de datos y análisis de la información documentada de una muestra de 2.000 atestados por desaparición de personas en diferentes puntos de la geografía española”.

Todos esos casos “han de estar cesados y esclarecidos policialmente e integrados en el Sistema de Personas Desaparecidas y Restos Humanos sin Identificar”, que maneja el Ministerio del Interior.

Herramienta predictiva

Los 2.000 expedientes de desapariciones los seleccionarán funcionarios del Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES), creado en 2008 para elaborar protocolos dirigidos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en esta materia, así como de elaborar informes y estudios estadísticos periódicos que permitan abordar, explicar y tratar de prevenir estos casos.

Estos expedientes se entregarán a la entidad a la que se le adjudique el contrato.

La investigación tiene por fin, en primer lugar, determinar los factores que discriminan entre los diferentes tipos de desapariciones, así como de los diferentes tipos de desenlaces asociados a los episodios de desaparición, especialmente los relaciones con el resultado o desenlace fatal, es decir, con el fallecimiento de la persona desaparecida.

Interior pretende explorar la potencial utilidad de esas variables, con la idea de crear, en primer lugar, un modelo de denuncia y recogida de información ante casos de desaparición estandarizado y con soporte empírico.

Por otro lado, también busca crear una herramienta predictiva del escenario o tipo de desaparición más probable, y de valoración de riesgo de desenlace fatal.

Y en tercer lugar, la empresa o entidad encargada del ejecutar el contrato tendrá que elaborar una “guía ejecutiva de la respuesta inicial de actuación policial basada en la evidencia”.

Motivos económicos, emocionales, laborales...

Ya en 2019 se contrató un estudio con la Universidad Autónoma de Madrid que apuntó en esta dirección de identificar indicadores de riesgo en un caso de desaparición para predecir el riesgo y el tipo de desenlace.

Ahora, Interior va a poner en marcha un modelo predictivo a partir de la información de 2.000 desapariciones investigadas y esclarecidas por las Fuerzas de Seguridad.

Se espera que se pueda establecer un modelo, una herramienta que por ejemplo tenga en cuenta circunstancias que rodean una desaparición: problemas económicos, problemas relacionados con las emociones, problemas en el ámbito laboral o escolar, problemas relacionados con las drogas...

El Ministerio del Interior está apostando últimamente por tratar de desarrollar herramientas predictivas a partir de datos de delitos ya sucedidos, para intentar predecir futuros casos de esos mismos fenómenos.

Además de con las desapariciones, ha puesto en marcha un proyecto para hacer algo similar con los casos de violencia de género y maltrato contra mujeres.