Vídeos sexuales e imágenes violentas: los contenidos que más se piden borrar en Internet

El incremento del uso de plataformas online con la pandemia ha elevado las solicitudes. Protección de Datos habilita un canal prioritario para atender demandas de afectados

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Agencia de Protección de Datos

Las denuncias para retirar fotografías y vídeos de contenido sexual o violento en Internet se han disparado en los últimos años. La Agencia Española de Protección de Datos confirma a Confidencial Digital que son las peticiones que más reciben en su página web.

Generalmente se trata de personas que, de forma inesperada, encuentran publicaciones con perfiles falsos en plataformas pornográficas, utilizando la imagen real y el número de teléfono de mujeres sin su consentimiento.

Protección de Datos ha habilitado un canal prioritario para la atención expresa a estos afectados, siempre que sean ciudadanos españoles o se encuentren en España.

Actualmente, el número de denuncias por estos casos a través de este canal alcanza las 569, según datos facilitados por la Agencia. De ellas, se han tramitado como urgentes 67.

Un vídeo con su rostro

Es la reclamación que hizo Martina (nombre ficticio) cuando encontró en la web ‘pornhub’ un vídeo de contenido sexual donde aparecía explícitamente su rostro.

El mismo día de la denuncia, la Agencia de Protección de Datos envió un link a la plataforma para que se retirara la grabación. Es la forma usual de proceder de los trabajadores que velan por el buen uso de los datos personales online. Lo que ocurre, es que en muchas ocasiones, se consigue retirar el vídeo pero no encontrar al responsable.

Así se infiere del análisis de las diferentes investigaciones que la Agencia tiene colgadas en su web. En el caso de Martina no pudieron encontrar al usuario que colgó dicho vídeo y las indagaciones terminaron archivándose. 

Con otro hombre

Lo mismo le ocurrió a Joaquín (nombre ficticio), quien presentó una denuncia cuando un día encontró en una página pornográfica imágenes suyas practicando sexo con otro hombre.

En este caso, el reclamante sí había consentido la retransmisión en directo del acto sexual, pero no dio el visto bueno a que se grabara, ni que se publicara y distribuyera posteriormente el contenido.

 

Joaquín no conocía las dinámicas de la plataforma, ni la posibilidad de lucro y la monetización de los vídeos grabados que la persona con la que mantuvo las relaciones homosexuales tenía. Tras pedirle explicaciones sobre lo ocurrido, el denunciado desapareció.

Llegó a encontrar 48 vídeos y fotografías colgados sin su consentimiento. Cuando la Agencia realizó la búsqueda, en octubre de 2020, solo quedaban 4 activos. Sin embargo, el reclamante hizo un nuevo ‘check in’ y dio con más material íntimo alojado en otras webs.  

Más afectados

El reclamante contactó por redes como Instagram y Grindr con personas que creía que también aparecían en otros vídeos con el denunciado. Las víctimas también se sorprendieron de que hubiera contenido sexual colgado en redes. Uno se negó a poner denuncia, otro no quiso dar su testimonio, pero le informó de que el sospechoso era famoso en círculos de porno casero en Barcelona, y un tercero, que admitió sentirse avergonzado, accedió a denunciar.

Los expertos advierten de que, con el uso masivo de Internet y, particularmente, tras la pandemia, que ha incrementado el número de horas ante al ordenador, estos peligros se agravan.

Documentos gráficos

Las redes sociales son también un gran foco de documentos gráficos que, luego, terminan recalando en las distintas webs de forma ilegal.

Así le sucedió a Daniel (también nombre ficticio), que denunció a Protección de Datos que alguien había subido sin su permiso vídeos sexuales suyos a Twitter y a OnlyFans, una web de contenido sexual que no para de crecer.

En ese caso es la Agencia la que solicita a Twitter Spain que de forma cautelar elimine ese tuit, y la compañía así lo hizo. Además, unos meses después, en abril de 2021 la red social eliminó también el perfil en el que se había publicado dicho contenido.

Cabe recordar que este tipo de investigaciones son independientes de las que puedan plantearse las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado o la Fiscalía, que son los que pueden exigir responsabilidades penales. La Agencia lo que logra es borrar la huella digital del contenido, es decir, limitar la difusión y el acceso de los datos personales, pero no consigue ninguna condena para el responsable más allá de una multa si lo encuentra.

Lo paras o lo pasas

Dada de la extensión de estos riesgos, Protección de Datos abrió en abril ese canal específico para priorizar este tipo de denuncias. Esta vía facilita la denuncia particular ,y pone el foco, además, en acoso a menores y violencia sexual contra las mujeres.

Este año, el organismo público ha licitado un contrato de 110.220 euros que, precisamente, pretende utilizar para ampliar la difusión del tipo de trabajo que desarrollan para que los ciudadanos sean conscientes de los derechos que pueden ejercer en Internet.

Entre las nuevas iniciativas está ‘Lo paras o lo pasas’, una campaña que va al centro de la diana del problema sobre la violencia sexual en internet.

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