Por qué España no va ganar esta Eurocopa

--Una temporada agotadora: 15 de los 23 jugadores de la convocatoria se reparten en 4 equipos. Real Madrid (5) y Barcelona (7) han realizado un esfuerzo físico brutal durante toda una temporada de records. Además, ambos disputaron la semifinal de la Champions League. Y el Barcelona una final de Copa. Los otros dos equipos, Athletic (2) y Atlético (1) disputaron toda una Europa League hasta la final. Y los vascos, una final de Copa. Jornadas de Liga los miércoles, partidos de Copa, Europa… muchos de los jugadores llegan a la Eurocopa arrastrando el cansancio de todo el año. Será una tarea difícil para los preparadores físicos de la Selección.

--Ausencias: Es uno de los factores más determinantes. Uno de los pilares de la ‘Roja’ como selección ganadora era su capacidad para hacer gol en momentos difíciles. Y se manifestaba, sobretodo, en David Villa, en torno al que se creó una cierta dependencia. Pero la grave lesión sufrida en invierno por el asturiano le ha dejado fuera de la convocatoria. Y no está claro su sustituto. Algo que se repite con Puyol. El catalán, que muchos consideran la ‘garra’ de España, tampoco estará en Polonia. Pese a que se empieza a notar su edad y en ocasiones se muestra más lento que los delanteros rivales, Puyol resultaba esencial para Del Bosque en el vestuario. No en vano es el capitán del Barcelona, el equipo que más jugadores aporta al combinado nacional. Él y Casillas son los capitanes de la selección, del Barcelona y del Madrid. Se da la circunstancia, además, que tanto Villa como Puyol son dos de los únicos tres jugadores que marcaron en el pasado Mundial (junto con Iniesta).

Y no hay que olvidar algunas ausencias de jugadores que, pese a hacer una gran temporada, no han entrado en la lista de 23. Por ejemplo Soldado, el pichichi nacional. O Adrián, la revelación de la temporada.

--Los rivales conocen los puntos débiles: se confirmó en el Mundial de 2010, y se escenificó en los amistosos posteriores contra grandes selecciones. España es el rival a batir, y los equipos a los que se enfrenta tienen sus estrategias para frenar el poderío ofensivo y creativo de la ‘Roja’. En el Mundial de Sudáfrica, por ejemplo, se vio como Paraguay –un rival a todas luces inferior- consiguió cortar la línea de creación del combinado español anulando a Xavi marcándole intensamente. Igual que en la final de Holanda, cuando la finalista desplegó todo un juego violento para frenar a los centrocampistas españoles. Más tarde se vio en los amistosos contra Argentina, donde cayó por 4-1, o el 4-0 que le endosó la selección portuguesa. Desde aquella final del Mundial, España ha perdido todos los partidos contra grandes selecciones, como Italia (2-1) e Inglaterra (1-0). Los grandes –al menos en los partidos amistosos- han cogido la medida a España.

--Factor psicológico del ‘defensor’: España ‘defiende’ el título. Es la actual campeona de Europa, y el factor defensivo se ha confirmado como un inconveniente para aquellos equipos que tratan de revalidar un título. Puede comprobarse a nivel de clubes: son contadas las ocasiones en las que un equipo ha ganado dos veces seguidas una Champions League. Todos los equipos que jueguen contra España no lo harán como favoritos. Es una responsabilidad y una presión con la que resulta muy difícil lidiar.

--Nadie lo ha conseguido: hasta el momento, nadie ha conseguido ganar tres torneos internacionales seguidos. Ni el Brasil de Pelé, ni la Argentina de Maradona, ni la Francia de Zinedine Zidane. Las reglas están para romperlas, pero las estadísticas muchas veces tienen un peso psicológico importante.

--No tiene nada que demostrar: España ha ganado una Eurocopa. Y dos años después, un Mundial. Ya no es aquella selección que volvía a casa de forma anticipada. Aquella presión de superación ha desaparecido. Nadie restaría mérito a esta selección si no se ganase esta Eurocopa. Y eso, según analizan los psicólogos, suele afectar a cómo encaran la competición los jugadores.

--‘Fracturas’ en el grupo: la gran competitividad de la Liga española deja huella en los jugadores. Ahora comparten hotel, concentración, comedor… pero no es fácil olvidar lo acontecido en estos dos años. Han sido muchos los roces entre futbolistas del Real Madrid y del Fútbol Club Barcelona. Y también con otros equipos, como el Atlético de Madrid o el Athletic de Bilbao. En ocasiones anteriores, los jugadores seleccionados han sabido superar esas rencillas y actuar como un grupo homogéneo. Pero los expertos siempre han considerado excepcional esta circunstancia. Quizás esta vez no haya tanta suerte.