¿Qué nos va costar el Brexit a los españoles?

No tañaron, finalmente, las campanas de Westminster el pasado 31 de enero tal y como había solicitado el primer ministro británico Boris Johnson. Sin embargo, sí que quedaba consolidada la salida del Reino Unido de la Unión Europea. El proceso conocido popularmente como 'Brexit' se terminaba oficializando.

Hace ya casi cuatro años de aquel 23 de junio del 2016 en el que Gran Bretaña celebraba un referéndum para preguntar a sus ciudadanos sobre la permanencia del país en la Unión Europea. Los resultados arrojaron un jarro de agua fría a quienes apostaban por que la situación no cambiaría: el 51'9% votó a favor de abandonar la comunidad europea frente al 48'1%. Se iniciaba así un procedimiento que duraría más de tres años.

Los resultados demostraron la heterogeneidad que reina en el territorio británico: Escocia, Irlanda del Norte, Londres y Gibraltar votaron mayoritariamente la opción de permanencia. En la isla esmeralda, un 55'8% votó a favor de quedarse; en la capital inglesa el resultado aún fue más notable, el 75'2% de los londinenses era contrario al Brexit; en Gibraltar, aunque su voto no fuese válido para el escrutinio final, la mayoría fue abrumadora a favor de quedarse dentro de la unión, solo el 4'09% votó la salida.

El caso de Escocia merece una mención especial. El país caledonio celebró en 2014 otro referéndum para salirse de Gran Bretaña y constituirse como un país independiente. En la campaña de esta consulta, uno de los argumentos que más se esgrimió desde los sectores unionistas fue que salirse de Reino Unido significaría salirse de la Unión Europea. Finalmente, la opción de permanencia ganó en las urnas. Dos años más tarde, en los comicios del Brexit, los escoceses, como era previsible, votaron mayoritariamente en contra de la salida: un 62% se decantó por continuar dentro de la organización supranacional.

La situación actual de Escocia es un interrogante, pues la ministra principal, Nicola Sturgeon (Partido Nacionalista Escocés), es partidaria de celebrar un nuevo referéndum para que los escoceses decidan -de nuevo- su relación con el resto del Reino Unido. Por su parte, Boris Johnson ya anunció que no permitiría ninguna otra consulta sobre esta cuestión.

En cuanto a las consecuencias que se van a derivar del Brexit, en Confidencial Digital hemos recurrido a dos expertos para conocer en qué medida la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea puede afectar tanto a España como a los españoles.

Gibraltar

Uno de los aspectos que más atención generaba era la situación de Gibraltar, debido a la cantidad de españoles que acuden a diario al peñón a trabajar. Sobre esta cuestión, el acuerdo de retirada incluye un protocolo específico sobre Gibraltar complementado por cuatro Memorandos de Entendimiento (MoUs) suscritos por los gobiernos de España y Reino Unido.

Uno de ellos está dedicado a los derechos de los ciudadanos, que prevé la constitución una Comisión de coordinación que garantice los derechos de los ciudadanos y de los trabajadores fronterizos. Ésta celebró una primera reunión técnica a finales de enero y está previsto constituirse formalmente el próximo 26 de febrero en Algeciras. La Comisión de coordinación está formada por 7 representantes de España -4 de la Administración General del Estado, 2 de la Junta de Andalucía y 1 de los municipios del Campo de Gibraltar- y 7 representantes de Reino Unido y Gibraltar.
El Acuerdo de Retirada mantiene los derechos de los trabajadores españoles fronterizos que cruzan cada día la verja para trabajar en Gibraltar. Todos los trabajadores fronterizos españoles que estén trabajando en Gibraltar hasta el 31 de diciembre de 2020 mantendrán sus derechos en los mismos términos que en la actualidad. Y los mantendrán de por vida mientras sean trabajadores fronterizos. Así, si tienen un contrato de trabajo, podrán seguir trabajando. Si pierden el empleo por la razón que sea, podrán seguir cruzando la verja para buscar un nuevo empleo en Gibraltar y tendrán derecho a prestaciones por desempleo en España.

Se mantendrán, también, sus derechos en materia de Seguridad Social. Los períodos por los que coticen en Gibraltar serán tenidos en cuenta para acceder a una pensión de jubilación tanto en Gibraltar, como en España, si también trabajaron parte de su vida laboral en España.

Comercio con Reino Unido

Otro de los asuntos fundamentales es cómo va a quedar la situación comercial a raíz de la salida. Según Antonio Moreno, catedrático y director del Master in Economics and Finance de la Facultad de Económicas de la Universidad de Navarra, aclara a Confidencial Digital que “la Unión Europea y Reino Unido buscarán un tratado de libre comercio, donde se incluirán cuestiones sobre el turismo”, uno de los sectores más importantes de la economía española. “Lo único que podría truncar el acuerdo es otro tipo de temas, como competencia por parte de Reino Unido en términos de menos impuestos o, especialmente, reducción de estándares medioambientales o regulatorios”, asegura Moreno.

También esta reducción de estándares pueda afectar a los mercados financieros lo cual “podría ser visto como una competencia desleal por la UE”. Antonio Moreno también afirma que esto “podría desencadenar una guerra comercial problemática”. 

Por otra parte, reconoce que “Reino Unido tampoco puede bajar impuestos a lo loco -ha de cuadrar presupuestos- ni bajar regulaciones medioambientales o financieras que le hagan ser un país arriesgado”.

Españoles en Reino Unido

Los españoles que, por cuestiones laborales viven en el Reino Unido, es otro de los temas a tener en cuenta en este nuevo escenario. El abogado Pedro Llorente, exsubsecretario de Estado de Empleo y Seguridad Social explica a ECD que aquellos “españoles que actualmente residan en el Reino Unido (o que adquieran su residencia en Reino Unido hasta el fin del fin del periodo transitorio en diciembre de 2020) van a poder seguir residiendo y trabajando en Reino Unido con los mismos derechos que ahora. Y esos derechos los van a mantener de por vida”.

Respecto a la Seguridad Social queda también incluida dentro del acuerdo: aquellos “periodos por los que coticen en el Reino Unido serán tenidos en cuenta para acceder a una pensión de jubilación tanto en Reino Unido, como en España, si también trabajaron parte de su vida laboral en España”.

Se puede decir, entonces, que la prioridad de la Unión Europea en la negociación del Brexit ha sido que los derechos de los ciudadanos europeos que hicieron uso de la libre circulación fuesen respetados. 

De cara a “los españoles y otros ciudadanos de la Unión Europea que empiecen a residir o lleguen al Reino Unido a partir del final del período transitorio habrá que estar a lo que se acuerde en el Acuerdo sobre la relación futura”, comenta Llorente.

Británicos en España

Con respecto a la situación de aquellos británicos que residen en España, es exactamente la misma que la de españoles y resto de europeos que viven en Gran Bretaña. Tal y como dice a Confidencial Digital Pedro Llorente: “el mantenimiento de los derechos también es de aplicación a los británicos que actualmente residan en España (o que adquieran su residencia en España hasta el fin del fin del periodo transitorio en diciembre de 2020). Van a tener los mismos derechos que tienen ahora en España y los van a mantener de por vida mientras sigan residiendo en España. Si trabajan en la actualidad, van a poder seguir trabajando.”

Con respecto a los jubilados, “van a poder seguir recibiendo asistencia sanitaria en España y van a poder seguir cobrando la pensión de jubilación que le abone la Seguridad Social británica”. Y, al igual que en el caso comentado previamente, “Los ciudadanos británicos que empiecen a residir o lleguen a España a partir del final del período transitorio habrá que estar a lo que se acuerde en el Acuerdo sobre la relación futura”.