¿Tiene que preocuparnos el trato que la prensa internacional da a España?

En las últimas semanas, los ataques a España procedentes de los principales periódicos de Alemania, Francia y Estados Unidos se han multiplicado, coincidiendo con la Diada, las manifestaciones de los sindicatos y los 'indignados', y las especulaciones sobre la petición de rescate. Desde el Gobierno han intentado quitar importancia a esta presión por parte de la prensa internacional pero, ¿debe preocuparnos esa visión que dan de nuestro país desde fuera?

Para responder a esta pregunta, El Confidencial Digital se ha puesto en contacto con Francisco Javier Pérez Latre profesor de Comunicación de la Universidad de Navarra y analista de Medios, que ve una clara influencia de los medios internacionales en la imagen exterior de España.

En opinión del profesor, los países tienen una imagen, exactamente igual que las instituciones o las marcas, y por eso las informaciones sobre España en la prensa internacional tienen incidencia sobre su credibilidad.

En la prensa internacional, España es una país en crisis económica severa y con serios problemas políticos (Cataluña y País Vasco) y sociales (huelgas, y manifestaciones a veces violentas).

Además, los medios en los que aparecen las informaciones son medios y agencias de noticias globales de referencia como The New York Times, Reuters, Wall Street Journal, Financial Times, The Economist, Associated Press a los que habría que añadir televisiones con influencia global como la BBC o la CNN.

Los leen los inversores internacionales y crean opinión entre líderes políticos mundiales y personas influyentes de todo el mundo. Además, como todos los medios de referencia, reciben eco a través de medios sociales como Twitter, Facebook o Google, que amplifican sus efectos, y generan opinión a nivel mundial.

Sobre la posibilidad de que esas informaciones sean interesadas, y filtradas por Gobiernos o políticos para hacer daño a España, Pérez Latre asegura que “no hay que pensar en conspiraciones, y tener en cuenta que la actual imagen de España está bastante generalizada en los demás países”.

¿Cómo cambiar la situación?

A la abundancia de informaciones negativas hay que responder con informaciones positivas y, para ello, es necesario desarrollar una nueva estrategia de comunicación exterior ensalzando las fortalezas de España.

En el plano económico, el Gobierno debe estar en contacto con las grandes empresas españolas y coordinar con ellas la información sobre sus éxitos, para que también sean conocidas internacionalmente.

Con eso, nos alejaremos de la imagen de que sólo vivimos del turismo, y mejoraremos en la percepción de un país con grandes empresarios, comprometidos e innivadores.

Desde el punto de vista político, también se puede mejorar la percepción que se tiene en el extranjero de que España es un país dividido y con muchas protestas sociales. Si el Gobierno de Cataluña está llevando a cabo una tarea de información internacional que también podría ser emprendida por el Ejecutivo central para contrarrestar ese desprestigio.

El problema, según Pérez Latre, es la falta de una estrategia clara debida, quizá, a la urgencia de las medidas a tomar. Para subsanar esa falta, sería necesario una mejor coordinación entre todos los organismos y portavoces del Gobierno, expresando todos el mismo mensaje.

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