Propuestas para que tu rutina de gimnasio no sea aburrida
A apenas tres meses de que llegue el verano, comenzamos a cuidarnos para poder lucir perfectos en la piscina y la playa. Sin embargo, esto conlleva apuntarnos al gimnasio y comenzar a cuidar nuestra dieta. El primero de los dos requisitos es el más tedioso para nosotros puesto que conlleva un esfuerzo físico y muchas veces la rutina monótona de ejercicios lleva a abandonar la actividad.
No obstante, no debemos permitir que esto pase. Cuidar nuestro cuerpo, en cualquier época del año, es muy importante y es por ello que el gimnasio ha de ser una opción muy a tener en cuenta que nunca debemos abandonar.
Todos sabemos que cuando nos proponemos acudir al gimnasio para mejorar así nuestra condición física y adquirir unos hábitos más saludables, es habitual que se empiece con mucha fuerza, pero que con el paso de las semanas vayamos perdiéndola y buscando excusas para dejar de ir lo antes posible.
Desde La Buena Vida entendemos que llevar a cabo una misma rutina día a tras día puede resultar aburrido y, por ello, hemos pensado en soluciones para hacer de ésta divertida y que no la queramos abandonar.
Por ello, aquí os dejamos algunos consejos para poder con la pereza y el aburrimiento:
-- En primer lugar debemos tener en cuenta que no podemos hacer día tras día los mismos ejercicios y, de ser así, debemos cambiar el orden de nuestra rutina. Así nuestra mente se despejará y cada día resultará menos tedioso acudir. El cambio es lo más importante por lo que si haces diariamente cinta aeróbica puedes combinarla con abdominales o pesas para fortalecer los músculos. Lo mismo con los días que acudes, varía las rutinas y el número de días por semana que vas. Ayudará a tu mente a liberarse. Además, los gimnasios suelen tener multitud de máquinas y probar cosas nuevas puede ser un punto interesante para olvidar el aburrimiento del que hablábamos al principio.
-- Actualmente existes rutinas como el 'Pilates Plus' o el 'Buti-Yoga' que no dejan que te aburras en ningún momento. Además con ellas te ahorras pensar qué cambios puedes emprender y al ser motorizadas estarás seguro de que lo que estás haciendo sirve para algo. La primera de ella combina las rutinas del Pilates con los movimientos de rutina cardiovasculares, mientras que la segunda fusiona el yoga con danzas tribales y movimientos pliométricos, con los que se tonifican los músculos más profundos del abdomen. Así, nunca habrá dos días iguales y por tanto el aburrimiento quedará fuera del gimnasio.
-- Combina el gimnasio con actividades al libre. Como ya hemos dicho antes, lo ideal es no acudir todos los días de la semana al gimnasio. Puede provocarnos un cansancio que nos lleve a perder fuerza y a querer dejarlo por momentos. Sin embargo, si quieres cuidar tu cuerpo todos los días puedes emplear los días que no acudas al gimnasio para correr o andar al aire libre. Estar en un espacio cerrado corriendo, con más gente levantando peso o gritando al hacer cada repetición puede llegar a ser agobiante y todos los días lo mismo, aburrido.
-- También puedes probar a acudir a clases competitivas. Muchas veces el aburrimiento se cura con la motivación y nada mejor para esto que enfrentarte de manera amistosa con algún amigo. El profesor monitoriza tu rendimiento y lo compara con el de tu compañero más cercano. Un reto como este te ayudará a no rendirte y acudir siempre al gimnasio con ganas de superar a tu amigo, a ver quien invita el domingo al aperitivo.
