¿Qué debes saber para vender tu edificio?

La situación actual del país es, por decir poco, complicada. Las diferentes áreas de la economía y la producción se encuentran frente a una inestabilidad sin precedentes. Lo mismo ocurre con el sector comercial y el retail; el consumo, el ocio, el turismo y la gastronomía han sido las actividades más golpeadas.

En cuanto al mercado inmobiliario, quienes disponen de bienes inmuebles de gran tamaño, como edificios, se encuentran frente a la oportunidad de realizar operaciones muy lucrativas con estos bienes pasivos. Por suerte para ellos, somos muchos los que compramos edificios.

Las ventajas de vender un edificio

Hay muchas ventajas en cuanto a este tipo de transacciones, pero dos de ellas son las más importantes. En primer lugar, deshacerse de un bien de este tipo mejora la movilidad económica y las posibilidades de capitalizar un bien que, dependiendo de cuánto tiempo se lo posea, bien puede significar una ganancia neta sobre el valor original.

En segundo lugar, desde el punto de vista operacional, la venta de un edificio también implica una disminución en tiempos, gastos y gestión de mantenimiento —algo que, en muchos casos, puede volverse una actividad muy engorrosa—.

Claves para vender un edificio

Uno de los aspectos más importantes para participar en operaciones inmobiliarias de envergadura es un análisis minucioso de la situación del mercado (esto es especialmente cierto hoy que la pandemia y la incertidumbre económica son una nueva normalidad).

El mercado inmobiliario se ha vuelto un escenario muy volátil. Existen muchas empresas, sin embargo, que se dedican a operar en él:  Renta Corporación es una de las más exitosas, puesto que tiene más de 25 años en el rubro. Esta brinda asesoría integral durante todo el proceso, con el objetivo de generar valor agregado en la puesta en venta. Por otro lado, la empresa cuenta con la seguridad jurídica que la normativa vigente establece para la actividad.

Al tratarse de una compañía especializada en la compra y venta de edificios, esta también se dedica a la restauración y puesta a punto de los bienes. En este sentido, suele aconsejarse que la rehabilitación del edificio sea encomendada siempre a profesionales especializados en el rubro.

El valor de un inmueble se encuentra en función del propósito para el que será dispuesto una vez realizada la venta; no será lo mismo un edificio en pos de una empresa habitacional, comercial o de hotelería. Saber a qué mercado en particular podría ser adaptado dicho inmueble y rehabilitarlo en función de sus necesidades es un aspecto fundamental para lograr una transacción exitosa. Para más detalles al respecto, puede conseguirse más información aquí.

En resumen, lo más importante a la hora de realizar una transacción de este tipo es una asesoría adecuada. Con base en ello, surge también un análisis pormenorizado de la operación y el propósito del inmueble, su remodelación y/o rehabilitación. Quienes compramos edificios tenemos ambas claves muy presentes a la hora de cotizar un inmueble y sopesar sus particularidades. Esto, por supuesto, es cierto también para quienes los venden.