La experta que enseña a los ejecutivos a hablar en público en 3 pasos

Hablar en público supone una gran complicación para muchas personas. La incapacidad a exponer cualquier tema ante un público desconocido se puede llegar a convertir en un gran inconveniente, sobre todo en el plano profesional. Sin embargo, muchos ejecutivos han dado con la solución: la experta en comunicación y oratoria Natalia Gómez del Pozuelo y su técnica para hablar en público en tres pasos.

Micrófono en una sala de conferencias.
Micrófono en una sala de conferencias.

A diario, nos encontramos tanto en la vida académica como en la laboral con situaciones difíciles, sin embargo, existen fórmulas para combatir este miedo. Una de las más populares es la aplicada por Natalia Gómez del Pozuelo, coach especializada en ayudar a combatir este miedo tan común en nuestra sociedad.

El miedo a hablar en público es un temor muy extendido. La sensación de que sólo nos pasa a nosotros es, según explica la experta en comunicación y oratoria es uno de los mayores lastres a la hora de vencerlo.

Como punto de partida, destaca que “el miedo a “ser visto” es algo biológico, común a todos los seres vivos”.

Normalmente, cuando nos exponemos a la mirada del otro sentimos un miedo natural, la clave reside en aprender a controlarlo.

“Entender cómo se produce el miedo y cómo reaccionamos ante él, es la llave para poder comenzar a librarse de él”, sentencia Natalia.

Perfiles de las personas que piden ayuda para superar este miedo

Natalia Gómez del Pozuelo ayuda día tras días a cientos de personas a superar un miedo más extendido de lo que habitualmente se piensa. No sólo personas que dan conferencias acuden a los expertos en busca de ayuda, sino todos aquellos que, aunque sea en para una ocasión puntual, necesitan perder esa sensación de pánico en el momento de enfrentarse a un público más o menos numeroso.

Según explica la experta a La Buena Vida, se pueden clasificar en tres grupos las personas que deciden superar este miedo:

-- Profesionales de todo tipo que están trabajando y que entre las labores que deben desempeñar en su día a día se encuentran las de exponer proyectos, tanto ante sus superiores directos, como ante clientes externos.

-- Estudiantes de universidad, que tienen que presentar un trabajo importante para su carrera académica como el trabajo de fin de grado (TFG) o la tesis del final de doctorado.

 

-- Profesores que tienen que dar conferencias fuera del ámbito universitario, ante un público más especializado.

Fases para aprender a hablar en público

Su libro, Libérate del miedo a hablar en público, se ha convertido en lectura de cabecera para muchos ejecutivos que necesitan aprender a exponer en conferencias y reuniones a diario sin ceder ante el miedo que les ataca.

En él, la experta en este campo ofrece una serie de ejercicios para guiar a cualquier persona a través de ese proceso que culmina con la eliminación de cualquier manifestación de miedo para siempre.

El trabajo que realizan todos aquellos que solicitan su ayuda se desarrolla en una doble vertiente:

--Por un lado, es muy importante la preparación de la propia charla. Dominar el tema y controlar todos los detalles de lo que vamos a decir. No se trata de ser un experto en todos los campos, sino en lo que vamos a llevar a cabo.  

-- En segundo lugar, la otra línea de actuación aborda la preparación frente a los nervios. Es fundamental separar entre tener nervios y entrar en una situación pánico. En este punto, cobra especial relevancia el control de la respiración.

La clave para superarlo se encuentra en ser capaces de llevar a cabo una simulación del miedo antes de la conferencia. De este modo, habiéndo demostrado a nuestra mente que lo puede hacer, es mucho más fácil evitar esos momentos de pánico que paralizan al individuo.

Estos son los tres pasos en los que consiste su técnica explicados por Natalia Gómez Pozuelo:

1. Entender el miedo.

La comprensión de por qué sentimos miedo es el primer paso para ser capaces de vencerlo y la mayoría de las veces proviene de dos formas de pensar:

-- Cargar la presentación de temor. Poner altísima la presión que nosotros mismos le ponemos a las cosas: es importantísima, si me sale mal las consecuencias van a ser terribles, seguro que me sale mal…

-- Querer ser perfectos. Pensar que el éxito es hacerlo como Steve Jobs, es decir, fijarnos una meta irreal y desproporcionadamente alta.

2. Prepararse minuciosamente el tema del que vamos a hablar.

-- Sabernos la presentación al dedillo. Cuánto mejor llevemos preparada la presentación, más seguros vamos a estar.

-- Nuestra actitud frente a la presentación. Como es probable que, aún así, los nervios hagan acto de presencia, es necesario hacer ejercicios que nos ayuden a gestionarlos en el momento de la presentación, es decir, a que tengan el menor efecto posible. Esto se logra a través de ejercicios de respiración, visualización y simulación.

3. Aprender para otras veces.

Una vez que somos conscientes de que, a pesar de los nervios, logramos hacer buenas presentaciones, nuestra mente carga con menos nervios las siguientes presentaciones y poco a poco logramos dejarlos atrás y lograr aquello que nos convierte en excelentes comunicadores:

“Es necesario convertir el miedo en amor por el mensaje, por el que escucha y por nosotros mismos” insiste Natalia,pensar que el miedo a hablar en público es una crueldad contra uno mismo, algo innecesario de lo que es relativamente sencillo librarse a través de un proceso que ya han seguido miles de personas y que permitirá a cada una descubrir todo su potencial de comunicación y sentirse libre para expresar sus ideas”.



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