Queratocono ¿Qué es?

El queratocono es una enfermedad cuya incidencia se ha incrementado en los últimos años entre los jóvenes. Debido a ello, es conveniente que se lleve a cabo una revisión a tiempo, ya que así se evitarán muchos problemas posteriores.

Esta enfermedad afecta a la salud visual del paciente. Empezará con una degeneración de la córnea consistente en un incremento progresivo de la curvatura de la misma, además de un adelgazamiento importante de la córnea. Irá tomando una forma de cono y esto provocará, a su vez, la pérdida de visión relacionada con astigmatismo y miopía.

Si no se actúa a tiempo, la córnea adquirirá una forma de cono hasta tal punto que el problema no se podrá corregir con lentillas o gafas.

¿Cuáles son los síntomas del queratocono?

El síntoma del queratocono más común es la visión borrosa. El paciente empezará a ver las imágenes borrosas.

Lo cierto es que los primeros síntomas de la enfermedad podrían producirse durante la adolescencia. Además, es importante tener presente que no tiene por qué darse en los 2 ojos al mismo tiempo, y su evolución podría ser diferente.

En el caso de que se tuviese miopía o astigmatismo, y el problema no se solucionase con gafas o lentillas, podría ser un síntoma del queratocono. Con las lentillas o las gafas podría mejorarse la visión, pero la córnea seguiría adoptando la forma curva y no tardarían en dejar de funcionar.

¿Qué tratamiento existe para el queratocono?

Hace tan solo unos años, la única forma de actuación ante el queratocono es corregir la visión usando lentes de contacto. En el momento en el que la enfermedad se extendía, la única posibilidad era la de hacer un trasplante de córnea.

Actualmente, el tratamiento del queratocono dependerá de diagnosticarlo lo antes posible. Dependiendo de la fase en la que se encuentre la enfermedad, se aplicará un tratamiento y otro.

Fase inicial

En el caso de que el diagnóstico haya sido precoz, se puede recurrir a un tratamiento compuesto por fármacos y lágrimas artificiales.

Fase intermedia

Si el queratocono ya está produciendo astigmatismo, una forma de combatir la visión borrosa es utilizar lentes de contacto, ya que con las gafas no se podría corregir.

Fase más avanzada

Si la detección ha sido tardía, o el problema ha ido a más, entonces habrá que llevar a cabo una cirugía para poder solucionar la situación.

Por fortuna, los avances médicos a los que podemos optar a día de hoy son mucho más avanzados y precisos, por lo que existe la posibilidad de evitar el trasplante de córnea, así como todos los efectos secundarios y contraindicaciones relacionadas.

Existen otros métodos, como el implante de anillos intracorneales o el crosslinking corneal que podría funcionar. Consúltalo con tu doctor para ver cuál es el método que más te conviene.

La doctora Victoria de Rojas advierte del incremento de los casos de queratocono entre los más jóvenes y nos quiere recordar que es importante hacer revisiones habituales, ya que podríamos evitar que la cosa vaya a más.