MADRID, 24 (CHANCE)
Ana María Obregón Navarro, madre de Ana Obregón, fallecía este sábado en Madrid a los 95 años, dejando completamente desolada a la bióloga que incapaz de superar su abatimiento tras la muerte de su hijo Aless Lequio hace justo un año, pierde ahora a una de las personas más importantes de su vida, a quien estaba muy unida.
Alessandro Lequio, uno de los grandes apoyos de la presentadora en estos duros momentos, demostraba una vez más su buena relación con la familia Obregón acompañándolos en el doloroso e íntimo último adiós a la matriarca del clan, que ha dejado tanto a Ana como a sus hermanos totalmente devastados, y este lunes ha desvelado en 'El programa de Ana Rosa' cómo está en estos duros momentos la madre de su hijo Aless.
El colaborador, que no suele comentar ningún aspecto de su vida privada en el programa en el que trabaja, ha roto su habitual discreción para confesa que la muerte de Ana María "tras una enfermedad muy larga" ha supuesto a Ana Obregón "un dolor tremendo". "Ella nunca había sufrido estas cosas, no había conocido el lado fúnebre de la vida y ahora le vienen todas juntas", ha asegurado, añadiendo que aunque todos los hermanos García Obregón - Juancho, Celia, Amalia y Javier - lo están pasando muy mal en estos duros momentos, "para Ana especialmente es muy doloroso".
Tras insinuar que Antonio García, padre de Ana, tampoco atraviesa por su mejor momento de salud porque "está... muy mayor" - ha señalado más serio de lo habitual con gesto de preocupación - Alessandro se ha pronunciado por primera vez sobre la pérdida de su hijo Aless hace un año, un tema del que el italiano no había hablado hasta ahora. "Es una familia muy unida, que es una piña y mi sitio es estar ahí con ellos en estos momentos porque es la abuela de mi hijo. Es triste. Esto formaba parte del plan. Que muriera la madre, el padre, a esas edades... Lo que no formaba parte del plan era lo otro", ha confesado visiblemente emocionado en referencia al fallecimiento de su hijo, sin querer añadir nada más al respecto, dejando claro que todavía le duele demasiado como para hablar del tema.
