MADRID, 15 (CHANCE)
Complicados momentos para José Ortega Cano que, haciendo oídos sordos a las controvertidas declaraciones sobre su matrimonio que ha hecho Ana María Aldón en televisión, sigue negando que exista ningún tipo de problema en su matrimonio y confiesa que no entiende la saña que hay contra su persona.
Aunque la gaditana le ha pedido públicamente que le de su sitio y que disfruten de la vida porque ella quiere sentir que le hace feliz su relación - desvelando que el torero está ausente, triste y más lejos de ella desde que se emitió la docuserie de Rocío Carrasco - las cosas no han cambiado en la pareja.
Y es que a pesar de que este fin de semana Ortega y Ana María asistieron juntos al bautizo de la hija de unos amigos en Andalucía - momento del que la colaboradora presumió en sus redes sociales, intentando ahuyentar las voces que apuntan a que su separación es inminente - la pareja regresó por separado a Madrid y, aunque su presencia estaba confirmada en la presentación de los nuevos carteles de la Feria de San Isidro, la gaditana prefirió quedarse en casa y el diestro acudió al acto acompañado por Gloria Camila.
Afectado por todo lo que se ha dicho sobre él y sobre su matrimonio en los últimos días, Ortega Cano evitó posar para la prensa y protegido en todo momento por su hija, conseguía pasar desapercibido durante la gala en la que llamó poderosamente la atención la ausencia de Ana María.
A su salida de la plaza, ocultos en la parte de atrás de un coche conducido por uno de los sobrinos del diestro, Ortega y Gloria tenían que enfrentarse a las incómodas preguntas de Kiko Jiménez que, ejerciendo de reportero para el programa en el que colabora, 'Sálvame', no dudó en salir corriendo detrás del vehículo en el que iban su exnovia y su 'exsuegro'. ¡Dale al play y no te pierdas el momento!
?