“Espantosa”, “superficial”, “simplista”, “bodrio inabarcable”. Lo que opinan los críticos sobre ‘Mentiras y gordas’, la última película con guión de la ministra de Cultura
La crítica española está siendo unánime en la condena a la película “Mentiras y gordas”, dirigida por Alfonso Albacete y coescrita por la ministra Ángeles González-Sinde.
Según los blogueros de El País, Jordi Minguell y Álvaro Pérez, el “bodrio inabarcable” de “Mentiras y gordas” está dirigido al “público chacho”, “una parte de la población con una sensibilidad cinematográfica labrada a golpe de zapping”.
Las críticas negativas de los medios de Prisa no terminan ahí: en la cadena SER, dos personalidades relevantes como Javier Rioyo y Carlos Boyero fueron, quizá, los más crueles con la película: el guión de González-Sinde “da escalofríos” y se suma al “montón de guiones horrorosos” escritos por la ministra. “Mentiras y gordas” es “una operación comercial”, “no le ha gustado a nadie que va al cine habitualmente”, y es “espantosa” hasta el punto de que “resulta complicado encontrar adjetivos” pues es “de las cosas más tontas” filmadas últimamente en España.
También en un medio de Prisa, el diario El País, Jordi Cota afirma que “creen haber hecho ‘Trainspotting’ pero les ha salido algo más parecido a José María Carrascal o a Martín Vigil”. Más moderado, Alberto Bermejo, en El Mundo, escribía que “es difícil encontrar alicientes narrativos o cinematográficos a este aparente retrato generacional”, con “situaciones repetitivas e impostadas” que propician “aburrimiento y desinterés”.
En ABC, Antonio Weinrichter critica la “ausencia de punto de vista” del filme y el hecho de que “se echa de menos algo de humor”. En Cinemanía, tras hacer notar que es “un retrato simplista de la juventud” y darle un 1,5 sobre 5 de valoración, Irene Crespo se pregunta si en serio es así la juventud actual.
La película de Albacete y González-Sinde, que cuenta con el reclamo de incorporar a actores jóvenes de series televisivas de éxito (Alejo Sauras, Ana de Armas, Mario Casas, Yon González) en escenas de gran crudeza de lenguaje y sexo, está siendo un éxito de taquilla, con una recaudación esperada de cinco millones de euros. Estos datos harían que la película coescrita por la ministra pueda optar a una subvención de en torno a un millón de euros.
