El Ministerio del Interior ha detectado que bandas organizadas están colocando explosivos en los cajeros automáticos

No se trata de un hecho aislado, sino de una práctica que comienza a extenderse. De esta forma, algunos altos mandos de la Guardia Civil están ordenando a sus agentes que no manipulen los cajeros automáticos en los que se haya detectado un robo, informa la Asociación Independiente de la Guardia Civil (Asigc).

Las órdenes se dirigen a las patrullas de servicio que lleguen en primer lugar y se les exige “que se abstengan de manipular cualquier objeto, limitándose a acordonar la zona y pasar el aviso urgente a la Central Operativa de Servicio (COS)”.

Una de estas situaciones con riesgo para los agentes se produjo en un cajero de Peñíscola, en Castellón. Allí, el explosivo no llegó a estallar, aunque estaba listo para la detonación, explicaron fuentes de la citada asociación de la Benemérita. Este mismo año, en la localidad castellonense de la Jana se produjo un suceso de estas características donde sí hicieron estallar el habitáculo.