Dependiente del Ministerio de Justicia

Sólo 18 posibles ‘bebes robados’ se han registrado en el archivo oficial de ADN creado en 2012

Se han registrado 134 peticiones, la mayoría de padres que buscan a sus hijos desaparecidos

Una de las madres que reclama el robo de sus hijos al nacer, durante una manifestación.
Una de las madres que reclama el robo de sus hijos al nacer, durante una manifestación.

El banco de datos oficial de ADN, creado para buscar coincidencias genéticas entre posibles ‘bebes robados’ y sus padres, no ha logrado ningún éxito hasta el momento. Los escasos registros de hijos dificultan la labor de los laboratorios.

El Ministerio de Justicia creó en 2012 el fichero ‘Perfiles de ADN de personas afectadas por la sustracción de recién nacidos” ante el aumento de denuncias públicas del robo de bebes, ocurridos hace décadas.

Este archivo está gestionado directamente por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF), y en él se registran los datos genéticos de aquellos interesados en encontrar a sus parientes desaparecidos.

Según la memoria anual del INTCF, hasta el mes de enero se introdujeron 134 perfiles genéticos en el registro. De ellos, 117 perfiles de ADN (obtenidos por  laboratorios privados) provinieron de solicitudes de afectados a través de la Oficina  Información a Afectados por la Posible Sustracción de Recién Nacidos,  y los 17 restantes fueron inscritos por peticiones judiciales o del  Ministerio Fiscal –relacionados con denuncias de robo-.

El problema: los hijos no buscan a los padres

De todos los perfiles registrados, tan sólo 18 corresponden a casos de posibles ‘bebes robados’ que buscan a sus progenitores naturales. En total supone un 13 por ciento.

Otro 13 por ciento corresponde a hermanos de sangre, criados por los padres naturales, que buscan a un hermano robado. Y el 74 por ciento restante son registros directos de progenitores que buscan a hijos desaparecidos.

El hecho de que se registre un índice tan bajo de perfiles de supuestos ‘bebes robados’ dificulta el cruce de resultados entre padres e hijos, disminuyendo las posibilidades de encontrar coincidencias genéticas.

La laboratorios privados, los más demandados

Sin embargo, el trabajo del INTCF no incluye la realización de los test genéticos. Para ello se debe recurrir a laboratorios privados, que ofrecen la posibilidad de incorporar de forma gratuita los resultados al archivo oficial.

Las pruebas en los laboratorios privados conllevan un coste de entre 50 y 300 euros. Los principales –media docena en toda España- registran un total de 2.286 perfiles de ADN relacionados con presuntos casos de robos de bebes.

Desde la 'Plataforma de Afectados de Clínicas de toda España. Causa de niños robados' se ha reconocido públicamente que existe un clima de desconfianza hacia el registro público de estos datos. Además, para poder incluir los perfiles en el registro oficial hace falta cumplir severas condiciones de calidad.

 

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