“La democracia tiene el riesgo de convertirse en una dictadura de la mediocridad y degenerar en demagogia”
Luis Alberto de Cuenca es un humanista pop. Premio Nacional de Crítica (1986), de Traducción (1987) y de Poesía (2015). Le interesa toda la cultura desde antes de Cristo. Como a Terencio. Fue secretario de Estado de Cultura en la etapa Aznar, en el equipo de Esperanza Aguirre

El último Premio Nacional de Poesía detesta a los que van de poetas, y tiene medalla de oro en decatlón cultural. Escribe, critica, traduce, observa, reflexiona, investiga, comenta, escucha, ensaya y contempla. Nada de lo humano le es ajeno: desde Sexto Empírico hasta Tintín. En su biografía conviven sin estridencias Eurípides, Esperanza Aguirre, Loquillo y Quentin Tarantino. Iconoclasta del "igualitarismo atroz". Martillo contra los herejes de la pedagogía que expulsan a las humanidades de las aulas. Político eventual con experiencia y libertad de reflexión. Pre romántico. Post marxista. Uno de la generación del 68 que cree utópicos los versos de Podemos. Ve a Sabina en la RAE. Y a Rajoy leyendo a Homero cuando cuelgue las botas. Un vitalista con la cabeza amueblada de muchos libros, mucha vida y mucha gente.