Los jueces de instrucción podrán convertirse en fiscales

Tal y como contamos en este confidencial el Ministro de Justicia, Rafael Catalá, anunció el cinco de diciembre, en el Congreso de los Diputados, su intención de promover una nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal en la que, entre otras cosas, la instrucción de los sumarios corresponderá a los fiscales, y no a los jueces como ocurre actualmente.

Desde que el ministro propuso que el fiscal sea instructor, no se ha dado respuesta a los más de 1.500 jueces de instrucción sobre su próximo destino, si finalmente se deroga esta función al Ministerio Fiscal. Actualmente, están repartidos de la siguiente manera: seis en la Audiencia Nacional, 503 colocados en diferentes puntos del territorio español y 1.061 que ejercen la jurisprudencia en Juzgados Mixtos. Estos últimos no son jueces de instrucción propiamente dichos, pero ejercen esa labor entre otras en los juzgados de primera instancia.

Fuentes extraoficiales cuentan a El Confidencial Digital que los jueces de instrucción tendrán dos caminos a escoger:

• - Como juez de garantías supervisando el proceso, garantizando el respeto a los derechos del investigado; y que, tras la primera fase de instrucción, una vez se tenga claro que hay indicios penales, se inicie inmediatamente el juicio oral, de forma que las pruebas se concentren en esta segunda fase.
• - O como fiscal para continuar con la labor de instruir en el proceso judicial, pero ahora formando parte del Ministerio Fiscal.

ECD, ha podido saber que el Ministerio dará la oportunidad a los más de 1.500 jueces de instrucción, repartidos por el territorio español, de convertirse en Fiscales en la próxima reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. A pesar de que no se trata de un cambio habitual en el sistema procesal, profesionales de la judicatura afirman a El Confidencial Digital que es un caso excepcional y necesario para reubicar a todos los magistrados que tendrán que enfocar de nuevo su carrera profesional.