Madrid reduce la apertura de cines de verano: pasa de 40 a 31
La asistencia ha superado las 12.000 personas durante el mes de julio a pesar de las restricciones por el coronavirus
La ciudad de Madrid acoge este verano 31 cines al aire libre distribuidos por 17 distritos de los 21 que tiene la Capital. A pesar de iniciativas como los Veranos de la Villa y la distribución de cines de verano por parques y centros culturales, el número de éstos se ha visto reducido con respecto al año anterior, llegando a haber nueve menos que en 2020, cuando se abrieron 40 cines en el exterior en diecinueve distritos.
En esta ocasión, más de 12.000 personas han podido disfrutar de las proyecciones en el exterior desde principios de julio, cuando empezaron la mayoría de estos eventos que durarán hasta mediados de septiembre.
Algunos de los cines al aire libre más icónicos y que ya forman parte de los veranos madrileños son el del Parque de la Bombilla, situado en Moncloa-Aravaca, o el CinePlaza del Matadero de Madrid. El primero de ellos acoge todos los años el festival del cine Fescinal, que este año celebra su trigésimo séptima edición.
Pero la oferta de Madrid no se limita a los cines de verano más conocidos y pasa por otros lugares como el autocine Madrid Race, el Instituto Francés, la Terraza Magnética o el Jardín Museo Reina Sofía que también ofrecen proyecciones en el exterior durante el verano
Además, diecisiete distritos de la Capital también abrirán este tipo de cines donde poder disfrutar de los últimos estrenos o de clásicos del séptimo arte. De todos ellos, Villa de Vallecas es el que más cines de verano pone a disposición de sus vecinos con un total de tres, seguido por otros distritos como Puente de Vallecas, Carabanchel, Usera, Tetuán o Retiro con dos cada uno.
Este año, las medidas covid impiden introducir comida dentro del recinto y obligan a llevar las mascarillas durante todo el largometraje. También se ha visto reducido el aforo para mantener la distancia de seguridad y se han instalado dispensadores gel hidroalcohólico a la salida y la entrada, todo ello, para que los madrileños puedan seguir disfrutando de los cines de verano de la ciudad.
