Mazazo a los toros: no habrá corridas hasta que el Gobierno no levante las restricciones de aforo

Pese a que el Gobierno anunció hace unos días la vuelta de las corridas taurinas en España, las condiciones parecen muy complicadas para su celebración.

En Fase 2 el aforo máximo permitido será de 400, y en Fase 3, de 800. Sin embargo, las asociaciones taurinas están convencidas de que no habrá corridas ni ningún tipo de espectáculo hasta dentro de mucho tiempo. “Hasta que el Gobierno no cambie las restricciones de aforo es totalmente inviable”, asegura Alberto Cosía, presidente de la Asociación Taurina de Boadilla del Monte.

Para ejemplificar, la Plaza de Toros de las Ventas tiene una capacidad de 24.000 espectadores, la Maestranza de Sevilla de 11.500 y la Plaza de Toros de Pamplona alberga a 19.700 personas, y lo máximo que podrían albergar en Fase 3 será 800 personas. Por lo tanto, no es rentable que se celebren corridas en esas condiciones.

Cosía asegura que hay muchos toreros, banderilleros y personas que dependen de la tauromaquia y que llevan sin ingresar nada más de medio año. En Boadilla del Monte dieron por suspendida la temporada el 10 de abril, ya que tuvieron que cancelar las fiestas de San Babilés y Virgen del Rosario.

“El Gobierno ha dicho que vuelven los toros, pero no es verdad, no se van a celebrar corridas”, afirma Mariano Pascual, encargado del Departamento de comunicación de la Plaza de Toros de Navarra.

Alberto Cosía explica que los ganaderos están perdiendo mucho dinero, en este período de tiempo han sacrificado entre 300 y 500 toros, los cuales conllevan un gran desembolso a la hora de criarlos. Por otra parte, para evitar tener grandes pérdidas la opción sería aumentar considerablemente el precio de las entradas, obviamente en estas circunstancias, creen que la cantidad de aficionados se vería reducida drásticamente.

“Espero que el Gobierno dé las competencias totales a las Comunidades Autónomas para que cada una pueda adaptarse según su situación, no podemos condenar a todas las plazas al mismo aforo”, afirma José María Garzón, empresario y organizador de corridas de toros.

Una corrida de toros en la Plaza de Córdoba (1º categoría), como mínimo cuesta 105.000 euros, dependiendo del cartel y las entradas, sin embargo, puede ascender a 400.000 euros si acuden toreros de categoría. Con las restricciones de aforo es totalmente imposible cubrir cualquier tipo de desembolso económico. José María Garzón asegura que todas las personas que viven de la tauromaquia lo están pasando mal: “La crianza de un toro cuesta aproximadamente 5.000 o 6.000 euros y durante este tiempo no han podido sacarle ningún tipo de rentabilidad”.

Aun así, José María Garzón apunta que estaría dispuesto a dar un espectáculo taurino si pudiese reunir a la mitad del aforo en sus respectivas plazas: “Con el 50% de espectadores ya es viable una corrida, pero con 800 es impensable”. Parece que los toros tendrán que esperar un poco más en los corrales.