Las ONG reclaman al Gobierno que no se deje de asistir a los enfermos de coronavirus por motivos de edad

La Plataforma del Tercer Sector (PTS), compuesta por 30.000 organizaciones, pide una atención médica “inclusiva” que no discrimine a personas con discapacidad o mayores

Ancianos dándose la mano

Más de 30.000 ONG han reclamado la asistencia sanitaria a personas con discapacidad o mayores. Ambos colectivos se están viendo muy afectados por el coronavirus. De hecho, entre ello es donde se encuentra una mayor proporción de enfermos.

Desde la Plataforma del Tercer Sector (PTS) piden que sean atendidos en las mismas condiciones que se está haciendo con el resto de contagiados porque “todas las vidas tienen el mismo valor”.

El presidente de PTS, Luciano Poyato ha sido el encargado de pedir al Gobierno que se haga una evaluación de los protocolos y medidas de actuación que se están llevando en esta crisis para no haya una discriminación con ambos colectivos.

Construir una “sociedad igualitaria”

Las ONG defienden que se construya una sociedad entre los ciudadanos y sea “igualitaria, justa e inclusiva” en la que se tengan en cuenta los derechos humanos.

Poyato señala que estamos en una crisis en la que “el compromiso moral de una sociedad con respeto a la dignidad y la igualdad se expresa por su capacidad de atender a todas las personas por igual y respetando el derecho a la vida y a la salud”.

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Organizaciones como Cáritas, Cruz Roja, la ONCE, el Comité de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) o la Plataforma de ONG de Acción Social (POAS) han respaldado este mensaje.

Poder acceder a cuidados intensivos

Todas estas organizaciones aseguran que es “necesario”, tanto para personas mayores como para discapacitados, poder acceder a los tratamientos de cuidados intensivos para poder luchar contra el coronavirus.

Piden que no sean abandonados ni  se les “deje de lado”, sino que se les debe dar la misma prioridad que tienen otros pacientes. En la PTS afirman que es un trato “injusto” porque son personas que están muy amenazadas por el riesgo de contagio por Covid-19 y están siendo los más perjudicados, viendo como sus derechos “se están viendo mermados”.