La capa de ozono se regenerará en cincuenta o sesenta años, con tal de que no haya grandes erupciones volcánicas

El agujero de la capa de ozono en la atmósfera ha alcanzado su superficie máxima y disminuirá en los próximos decenios, según observaciones de científicos de la Organización Meteorológica Mundial (WMO, sus siglas en inglés) y la NASA.

Meteorólogos que llevan observando y cuantificando desde hace más de 30 años la concentración en la atmósfera de sustancias destructoras de la capa de ozono, han explicado que “la velocidad del crecimiento de concentración de estos químicos ha comenzado a disminuir”, gracias a la aplicación del protocolo de Montreal firmado en 1989.

Observaciones de la WMO de principios de este mes sugieren que las pérdidas de ozono en los dos polos de la Tierra se han reducido en los cinco últimos años. El agujero sobre la Antártida medía el 1 de septiembre 12.5 millones de kilómetros cuadrados, la mitad de lo previsiblemente estimado.

“Si continuamos la eliminación de emisiones, probablemente nuestros bisnietos podrán tomar baños de sol en las playas de Argentina, Noruega o Australia sin los temores de nuestros hijos de hoy”, explicó Daniel Albritton, director del laboratorio de Aeronáutica de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica.

Albritton también apuntó que la regeneración de la capa atmosférica puede durar entre 50 y 60 años. El mantenimiento de la actual tendencia a la regeneración depende de que continúe el Protocolo de Montreal, y de que no ocurran fenómenos naturales como grandes erupciones volcánicas, precisó.