Javier Fumero

El CNI pincha teléfonos de tenientes generales

José Bono saca a la venta estos días el segundo tomo de sus apuntes biográficos. El volumen se llama ‘Diario de un ministro. De la tragedia del 11-M al desafío independentista catalán’ y promete emociones fuertes.

Yo me quedo con un dato que –de ser cierto- resulta un tanto inquietante. El CNI pinchó en 2006 los teléfonos de varios tenientes generales, próximos al General José Mena que había sugerido en la Pascua Militar la intervención del Ejército en Cataluña si el Estatut sobrepasaba los límites de la Constitución.

Según la tesis de Bono, el Gobierno Zapatero comunicó esta decisión al entonces director Alberto Saiz para frenar un comunicado conjunto de altos mandos militares que derivara en una insubordinación intolerable.

El ex ministro socialista desvela también que el Ejecutivo tuvo conocimiento entonces de que el propio José Mena había declarado en una reunión del Consejo Superior del Ejército lo siguiente:

-- “Si el Estatuto de Cataluña va hacia delante, la responsabilidad será de la Corona, y si la Corona no actúa, tendrá que tomar las maletas e irse de España”.

Qué quieren que les diga.

Primero, no me hace ninguna gracia confirmar que tenemos un organismo que todo lo ve, todo lo escucha, todo lo sabe. Estos sucesos me retrotraen a la época del gabinete de escuchas del CESID, capaz de reunir aquella cintateca con registros privados del Rey, políticos, diplomáticos, empresarios, periodistas… Una película de terror.

En segundo lugar, creo que Bono debería ser más discreto. Debería valorar que las personas que han sido elegidas para ocupar puestos relevantes en la estructura del Estado están obligados a guardar la debida reserva. Iba en el sueldo que cobró graciosamente durante tantos años.

Más en twitter: @javierfumero

 
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