Digámoslo todo: hoy toca aplaudir
Forma parte de la constitución humana, creo. Pero esa tendencia a ver siempre en primer lugar lo negativo, lo que no funciona, las cosas mal hechas, nos impide muchas veces ser objetivos, ecuánimes. Porque hay cosas que se hacen bien y no se destacan lo suficiente.
Por eso hoy quiero llamar la atención sobre un hecho relevante que está pasando inadvertido: España está siendo un ejemplo en la lucha contra el yihadismo.
Mientras países de nuestro entorno, como Reino Unido o Francia, están sufriendo atentados en sus territorios, nuestro país ha logrado salir indemne por hacer bien su trabajo. Hasta ahora, es cierto. Porque nadie conoce el futuro. Pero no es poco.
Algunos datos recientes confirman que los servicios antiterroristas españoles están empleándose a fondo y resultando muy competentes. Dos ejemplos recientes:
1. Este martes se desarticuló en Marruecos y España una red de 14 presuntos yihadistas. Hubo 13 detenciones en poblaciones del país vecino: Nador, Fez, Casablanca, Alhucemas y Driuch. Y una en Madrid, en San Martín de la Vega. Todos están acusados de captar, reclutar y adoctrinar gente para integrarla en las filas del Daesh en Siria e Irak. Fue una operación conjunta protagonizada por agentes de los dos países, que compartieron información y medios.
2. En marzo de 2014, la policía española alertó a las autoridades francesas de la peligrosidad y vinculación con el islamismo radical del marroquí Ayoub El Khazzani, de 25 años, reducido el pasado viernes en Francia cuando iba a atacar el tren Thalys 9364 que transportaba a 554 pasajeros de Ámsterdam a París.
Dos años antes, los servicios antiterroristas españoles incluyeron su nombre en las bases de datos policiales del espacio Schengen por su extremismo religioso. El detenido residió entre 2007 y marzo de 2014 en España –primero en Madrid y luego en Algeciras (Cádiz)-, desde donde el año pasado partió hacia Francia y, de allí, saltó a Siria supuestamente para enrolarse en el Estado Islámico. Era lo que las policías de todo el mundo definen como un combatiente retornado.
Estos dos datos confirman la eficacia y capacitación de nuestras fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado. Ante este nuevo tipo de terrorismo tan complejo –sin rostro, de lobos solitarios y células durmientes- es gratificante saber que estamos bien protegidos.
Probablemente nunca conozcamos sus nombres, por motivos de seguridad. Ni las gestas heroicas que habrán tenido que realizar para infiltrarse, obtener información sensible y descubrir tramas terroristas. Pero están ahí y apenas los mencionamos.
Mi felicitación por el trabajo que realizan y mi admiración por su abnegación y sacrificio.
Más en twitter: @javierfumero
