José Apezarena

Un Gobierno de incompetentes

Pedro Sánchez y sus ministros, en octubre del pasado año.
Pedro Sánchez y sus ministros.

Moncloa montó otro Open House de los suyos el jueves pasado, 11 de octubre, para escenificar el pacto presupuestario que habían alcanzado la noche anterior Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Con firma solemne ante las cámaras de las televisiones.

Ambos políticos habían tenido que acelerar los contactos para cerrar el acuerdo sobre los Presupuestos de 2019, porque el lunes debían que ser presentados en Bruselas. Y vinieron las prisas.

La medida estrella del pacto entre el Gobierno y Podemos, y así lo vendieron desde las dos instancias, era la subida del salario mínimo interprofesional a 900 euros en 2019. Nada menos que un 22% de incremento.

La aprobación del nuevo SMI se realiza por decreto ley, sin necesidad de pasar por el Parlamento y, además, en realidad no depende del proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado, pero es igual: había que anunciar algo aparatoso.

La subida del salario mínimo a 900 euros al mes conlleva un aumento de lo que pagan un millón de autónomos a la Seguridad Social (el 85%), la base mínima, pues ambos indicadores están referenciados.

La Federación de Trabajadores Autónomos (ATA) proclamó inmediatamente que estos profesionales serían los grandes damnificados. Calculó un incremento de costes de 3.000 euros anuales por trabajador contratado, sumando las cotizaciones sociales y el IRPF.

A la vista del revuelo, Pedro Sánchez se vio obligado a protagonizar, el miércoles, su enésima rectificación. ¿Qué había pasado?. Que no tuvo en cuenta los informes técnicos de los ministerios para que la subida del salario mínimo se desvinculara de los cuotas de los autónomos.

Según ha podido confirmar Confidencial Digital, la medida, en efecto, se aprobó sin la calificación técnica habitual por de los ministerios implicados. El decreto, que debe aprobar el Consejo de Ministros antes de final de año, no incluía la disposición normativa para desvincular la subida del SMI de las cuotas mínimas de los autónomos.

Altos cargos de los ministerios de Hacienda y Trabajo atribuyen la “pifia” del Gobierno (así lo califican en privado) a las prisas que impidieron la elaboración de un informe técnico riguroso. “La chapuza es culpa de los políticos, que querían vender un pacto ya, y ni siquiera nos consultaron”.

 

Gobierno de incompetentes, que improvisa, anuncia y después rectifica. Y eso, una y otra vez. No se cansan. ¿Por qué no preguntan, no se informan, no estudian bien los asuntos?

¿De dónde han salido estos campeones?

editor@elconfidencialdigital.com

En Twitter @JoseApezarena

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