Listos para una derrota de Pedro Sánchez
Pedro Sánchez ha ganado la batalla, en la crisis del PSOE, con su victoria en las primarias frente a Susana Díaz.
Como consecuencia, sus principales rivales se han retirado a los cuarteles de invierno, y todo indica que también ganará el Congreso Federal y que conseguirá nombrar una ejecutiva a su medida, en la que no estarán ni barones ni susanistas.
Ha ganado esta batalla, pero... aún no ha ganado la guerra.
Veteranos socialistas han empezado a preparar un hipotético futuro sin Sánchez. Diseñan cómo se articulará el PSOE en el caso de que el secretario general vuelva a perder (y sería por tercera vez) las elecciones generales.
Para ese momento, quieren tener preparada la alternativa. Y el sucesor será Eduardo Madina. El mismo que ya se enfrentó a Sánchez en unas primarias y que perdió por poco. El Madina que ha sido mano derecha de Susana Díaz durante la última campaña por la secretaría general.
Así que, si Pedro Sánchez pierde, los muñidores en la sombra podrán en marcha la "operación sucesor".
En ese momento, es decir tras una nueva derrota en las generales, el actual líder solamente tendrá una tabla de salvación: intentar un gobierno con los apoyos de Podemos y de las formaciones independentistas.
O sea, que, paradójicamente, volveríamos al escenario de octubre pasado, al de aquel comité federal en el que Pedro Sánchez fue descabalgado de la secretaría general por la fuerza, precisamente para impedirle ese Gobierno con Podemos e independentistas.
Desde luego, si los votos se lo permiten, Pedro Sánchez intentará formar ese Gobierno.
Si no lo consigue, quedará sentenciado. Y para entonces ya estará listo el recambio, el sucesor en la sombra, Eduardo Madina. Al que hasta ese momento van a mantener protegido, apartado de cualquier riesgo, sin protagonismos, para no quemarlo.
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