José Apezarena

¿Puede Rajoy gobernar España con 137 diputados?

Rajoy se muestra dispuesto a intentar formar Gobierno de cualquier forma. O logrando un Gobierno de concentración, que incluya a PSOE y Ciudadanos, o solo con Ciudadanos. La primera hipótesis es ya imposible, porque los socialistas se niegan en redondo. La segunda presenta dificultades serias, por las pegas que pone Albert Rivera, aunque no son definitivas.

En cualquier caso, en la peor situación, Rajoy se presentará en el Congreso con sus 137 escaños en solitario. Y, entonces, si no hay 137 votos en contra (por la vía de las abstenciones, y hasta de las ausencias del hemiciclo), Rajoy podría de hecho ser investido presidente del Gobierno.

Técnicamente es posible formar Gobierno con solo esa cifra de apoyos. Pero ¿se puede gobernar así, con tan poco respaldos? Es evidente, que, en esa coyuntura, nada conseguirá sin pactar con otros.

Si no los hubiera, si no lograra ningún apoyo, un Ejecutivo así puede sobrevivir, en primer lugar, sin aprobar nada de nada en el Congreso. Sería una legislatura sin leyes de ningún tipo. Y sometido a miles de angustias, por las iniciativas que pueda proponer la oposición, incluidas, por ejemplo, comisiones de investigación, reprobaciones…

Cabe también la línea de ir sacando adelante algunas iniciativas concretas y singulares por la vía de, según los casos, de pactarlas con unos o con otros, mediante acuerdos parciales y coyunturales.

En ese sentido, hasta tendría en su mano la opción de proponer reformas y soluciones que difícilmente puedan bloquear o rechazar algunas de las fuerzas de la oposición, a las que se pondría en un brete inexplicable si dijeran que no.

El punto crítico son los Presupuestos Generales del Estado. Los del próximo año está claro que se negociarán durante las próximas conversaciones para la investidura. Y no es difícil que consigan respaldo, a cambio de las modificaciones oportunas, de concesiones que den vía libre al nuevo Ejecutivo. Porque, en caso contrario, si existiera bloqueo, la única salida serían unas terceras elecciones, algo con lo que nadie quiere cargar como culpable.

Para 2018, en una previsible imposibilidad de acuerdo por falta de apoyos, cabría prorrogar los de 2017.

El problema grave surge de cara a 2019. Por eso, la hipótesis más clara es que Mariano Rajoy tendrá un Gobierno para dos años, al cabo de los cuales deberá disolver las Cortes y convocar nuevas elecciones.

 

Y en dos años pueden cambiar muchas cosas. Dentro del país, en los partidos, y singularmente dentro del PP. El escenario actual no se repetirá.

Si hay Gobierno, como parece que ocurrirá, nos esperan dos legislaturas escalofriantes.

Video-Comentario del dia Confidencialmente:

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En Twitter @JoseApezarena


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