Y Ayuso echó a Pablo Iglesias

Isabel García Ayuso se apuntó políticamente el tanto de haber ‘echado’ a Pablo Iglesias de la vicepresidencia del Gobierno, con una frase que se hizo viral: “España me debe una, he sacado a Pablo Iglesias de Moncloa”.

Ahora se ha ‘apuntado’ otro: con su espectacular victoria en las elecciones madrileñas, que ha cerrado a la izquierda cualquier opción de hacerse con el mando en la Comunidad, ha ‘sacado’ de la política a Pablo Iglesias, que anoche anunció que lo abandona todo.

Las elecciones celebradas en Madrid han ofrecido un alto número de novedades y sorpresas.

A título meramente enunciativo, y resumiendo mucho, estos son algunos otros datos más relevantes:

-Díaz Ayuso, con 65 escaños, acumula más diputados que la suma de los tres partidos de izquierda. Y eso le puede permitir gobernar sin necesidad del voto de Vox: basta con que se abstengan.

-El PP ha ganado en todas las circunscripciones (también en ayuntamientos gobernados por los socialistas) salvo en dos localidades. Y, por tanto, en todos los distritos de la capital, incluidos los considerados más de izquierdas como es el caso de llamado “cinturón rojo”.

-La victoria de Ayuso resulta especialmente significativa si se tiene en cuenta que se le han enfrentado rivales del nivel de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.

-Además, ha logrado contener a Vox, porque solamente sube un escaño

-Fracaso estrepitoso del PSOE, que en Madrid ha cosechado el peor resultado de su historia (el anterior peor logró el 25,4% de los votos). Ha pasado, de ganar las  anteriores elecciones, a la debacle.

-Fracaso serio de Pedro Sánchez, que designó a Gabilondo como candidato, y que se implicó intensamente en los inicios de la campaña. Su propio tirón electoral está en discusión.

-Y fiasco para su hombre de confianza, Iván Redondo, que ha sido el jefe de la campaña socialista. Algo que le puede pasar factura personal, porque en el partido le van a echar todas las culpas.

-No ha funcionado el planteamiento de enfrentar bloques ideológicos, ni el mensaje de frenar a la ultraderecha, el “No pasarán” de Adriana Lastra. Y tampoco el recurso al miedo y la crispación aprovechando los envíos de balas por correo.

-El fracaso socialista resulta mayor porque ya no es el segundo partido. Más Madrid ha igualado en escaños a los socialistas pero suma más votos. Con ello, Mónica García será la líder de la oposición en la Asamblea.

-No obstante, ese resultado será difícil de trasladar a nivel nacional porque el partido de Errejón no tiene implantación ni relevancia fuera de Madrid.

-El desastre en Ciudadanos, que se queda fuera, pronostica la desaparición del partido a nivel nacional. Su caída no ha beneficiado para nada al PSOE.

-El escenario político nacional ha cambiado con el resultado de Madrid. El PP ha recuperado apoyos de los mejores tiempos, Ciudadanos está en trance de desaparecer, el PSOE tiene un problema de liderazgo, Vox no sube (ya se paró en Galicia, donde no consiguió diputados).

-Es verdad que España no es Madrid, pero el 4-M empuja al PP. Y lo mismo a Pablo Casado, que fue quien nombró a Ayuso para encabezar la comunidad. De entrada, no parece que Ayuso vaya a animarse a disputarle el liderazgo nacional.

-Se ha roto el mito de que la alta participación electoral beneficia a la izquierda.

-Podemos se ha salvado gracias a la candidatura de Pablo Iglesias: ha mejorado resultados, pero sigue siendo el quinto y último partido.

-La renuncia de Pablo Iglesias, que culmina un proceso de fracaso político personal, pone en entredicho el futuro de la formación morada.

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