Dolores Delgado, cuidado con Villarejo
La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, se reunió el miércoles con dos conocidos periodistas, en un lugar un tanto chocante: un piso próximo a la Puerta del Sol, utilizado como vivienda por el ex juez Baltasar Garzón.
Ocurre que el bufete de Garzón, pareja de Dolores Delgado, defiende a uno de los implicados en la causa de Villarejo: el comisario García Castaño.
Los dos periodistas que acudieron a la cita se han distinguido por el elevado número de exclusivas que han publicado procedentes de Villarejo. La fiscal abandonó el edificio después de los informadores, protegida por dos guardaespaldas y un asesor.
Esa reunión se celebró después de anunciarse la puesta en libertad ese día del ex comisario.
Hace unas semanas, Dolores Delgado protagonizó otra reunión chocante. Se sentó, a la mesa de una conocida marisquería cercana al Bernabéu, junto con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, el periodista de La Sexta Antonio García Ferreras, y, por supuesto, Baltasar Garzón.
Y volvía a aparecer Villarejo, porque Florentino Pérez ha sido denunciante en la pieza separada número 17 del caso Tándem, o caso Villarejo, que investiga los presuntos pagos de la eléctrica Iberdrola al comisario.
Aunque el episodio más escandaloso fue la famosa comida de octubre de 2009, a la que asistieron Baltasar Garzón, unos mandos policiales y, por supuesto, Villarejo. El comisario grabó todo lo que los asistentes dijeron en las más de tres horas que duró la comida.
Esas grabaciones salieron a la luz en 2018, y en ellas se escuchan bromas sobre sexo y referencias a profesionales de la judicatura, como el entonces juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, del que la propia Delgado dijo "Marlaska es maricón".
Y posteriormente se publicó que en la documentación incautada a Villarejo, que había sido arrestado en noviembre de 2017 y se encontraba en prisión preventiva, una anotación detallaba un encuentro de Villarejo con Delgado -supuestamente se refiere a ella como Dos- para recabar su apoyo en beneficio del empresario naviero Ángel Pérez-Maura, inmerso en un proceso dependiente de ese tribunal.
Dolores Delgado era ministra de Justicia, y tuvo que dar explicaciones en el Congreso. Dijo que había coincidido con Villarejo en tres ocasiones.
Siempre viene a cuento lo de la mujer del Cesar y la honestidad, pero más en el caso de una ministra de Justicia. Y mucho más, creo, si se trata de la Fiscal General del Estado.
Dolores Delgado tendría que guardarse de Villarejo… Si es que aún está a tiempo.
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