Palabrita de Pedro Sánchez
A Enrique Tierno Galván se le atribuyen algunas frases paradójicas, como aquella de que en periodo electoral se puede prometer cualquier cosa, aunque luego no se piense cumplir.
Y también se le adjudica esta otra: “Cuando digo nunca… quiero decir que de momento no”.
Esta última le cae como un traje a medida a nuestro presidente del Gobierno.
“No habrá referéndum de autodeterminación. Nunca. Jamás”, afirmó rotundamente, Pedro Sánchez, hasta con energía según dicen las crónicas, en el Pleno del Congreso celebrado el miércoles.
El presidente del Gobierno comprometió así su palabra, dando garantías personales de que el diálogo abierto con el independentismo catalán no conducirá a ningún acuerdo que sobrepase la Constitución.
Un movimiento de ese estilo, para autorizar un referéndum de autodeterminación, necesitaría un cambio en la Constitución con el apoyo de tres quintos del Congreso de los Diputados, es decir, 210 de sus 350 escaños. “Y el PSOE no lo apoyará. Nunca, jamás”, remachó.
Se atrevió a más, equiparando su decisión de indultar a los líderes del procés con el “espíritu de concordia” que hizo posible la Transición. Aquel espíritu -afirmó- es el mismo que inspira el perdón a los líderes independentistas y la apertura de un proceso de diálogo con sus formaciones políticas.
“Ha llegado el momento de la política” para dejar atrás “estos años estériles y dolorosos”.
Los independentistas “quebrantaron la ley”, “no fueron perseguidos por sus ideas”, y si alguno siente la tentación de reproducir ese tipo de comportamientos, el Gobierno “seguirá actuando con la máxima firmeza”, concluyó.
Tan solemnes y campanudas palabras no causaron mucha impresión en el hemiciclo, según dicen las crónicas. Motivo: la credibilidad de Pedro Sánchez se encuentra a la altura del betún.
Después de asistir a tantos compromisos rotos, uno de ellos la promesa de que nunca firmaría indultos a los independentistas condenados por el 1-O, ahora nadie le cree.
Ni siquiera sus amigos y socios. Lo dejó bien claro Gabriel Rufián, de Esquerra, cuando, atendiendo a lo ocurrido con los indultos, comentó en tono burlón sobre el referéndum de autodeterminación: “Denos tiempo”.
Otro de sus grandes resbalones se resume en aquella afirmación preelectoral de que nunca pactaría con Podemos, porque no podría “dormir tranquilo” con Pablo Iglesias cerca, para, una vez celebrados los comicios, anunciar un Gobierno de coalición con ellos.
Así que, respecto al referéndum de autodeterminación, no son pocos los que opinan que no hay que descartarlo: si un día lo necesita para seguir gobernando, lo permitirá. Palabrita de Pedro Sánchez.
O sea, lo de Tierno Galván: “Cuando digo nunca, quiero decir que de momento no”.
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